Desquiciamiento

20/02/2023
Desquiciamiento

El Rayo B dio la cara ante el Ursaria, pero un despiste en la primera parte y el show arbitral en la segunda hace que salga de su visita al líder goleado (3-0) y con 9 jugadores.

En un encuentro que de por sí se antojaba complicado, el Rayo B acabó desquiciado con el arbitraje que le hizo acabar el partido con tan solo 9 jugadores ante un Ursaria que sacó un 3-0 engañoso para mantenerse su ventaja en el liderato.

Arrancaba el partido en la Ciudad Deportiva de Cobeña con los dos equipos con sus ideas claras desde el comienzo. Los de Iván Amaya buscaban hacer daño en rápidas transiciones, y los de Joselu Sánchez queriendo tener el balón y marcar el ritmo. El único que no pareció estar seguro de lo que debía hacer era el colegiado, señor Carrascosa Vázquez, que ya empezó rezongando a Jaime por hablarle antes de cumplidos 3 minutos. La cosa no fue a mejor para el trencilla y sus asistentes.

El comienzo del Filial de la Franja fue tan electrizante como efímero, disponiendo en el primer cuarto de hora de llegadas peligrosas a la contra, siendo la más clara un disparo desviado de Asier estando solo en el pico del área chica. El buen inicio visitante se diluyó al minuto 15, cuando una falta clara del central local al borde de la frontal fue señalada por el árbitro como infracción en ataque. El error del juez afectó a los vallecanos, al punto de que minuto y medio después se encajó el primer gol.

Apenas llegados a los 17 jugados, y luego de un córner propiciado por la primera intervención salvadora de Pantoja de la mañana, una desconexión total de la zaga franjirroja propiciase el robo en zona prohibida y la definición de Higuera desde el costado derecho del área. Caía el primero del Ursaria y empezaba el desquiciamiento del Rayo B consigo mismo, pues a raíz del tanto, no se logró encadenar una posesión larga prácticamente hasta el descanso, y menos aun con los serios problemas que había al sacar el balón desde atrás. Hubo varias pérdidas en el primer tercio de cancha después del tanto, algo que reafirmaba el dominio de un Ursaria que no amplió su ventaja porque Pantoja no quiso. La mejor noticia al acabar la primera parte era que la desventaja era mínima.

En el segundo tiempo hubo 9 minutos iniciales de tanteo del terreno, la calma que precedió una tormenta arbitral. Una disputa en el área rayista propicio el contagio de un defensa con la pierna del delantero que se fue al suelo de inmediato. La típica acción en que, si atacas, es penalti claro, y si defiendes, no se puede pitar nunca. En este caso se pitó, y las consecuencias fueron tarjetas por protestar para Jaime y Diego Méndez, ambas con repercusión posterior. Se encargaría Jacobo de lanzar la pena máxima y Pantoja de atajársela, lanzándose bajo a su derecha y adivinando las intenciones del lanzador. El Rayo B se mantenía en el partido porque su portero así lo quiso.

Tras el penalti, se sucedieron 20 minutos en que el peligro rondaba ambas áreas, y tal vez algo más la del Ursaria, pues el Rayo B dispuso de buenas oportunidades que no materializó entre palos, dado que el meta local Fran estuvo inédito en el encuentro. Las aspiraciones del Rayo B se terminaron de diluir cuando, a falta del cuarto de hora final, una infracción en medio campo le conllevaba una cuestionable segunda amarilla a Jaime Alcolado. Con 10 quedaban los de Vallecas por la expulsión de su central.

La inferioridad de un hombre se puede tratar de disimular con algo más de esfuerzos. La de dos ya se antoja un ejercicio difícil. Si era dudosa la segunda tarjeta a Jaime, la que vio el capitán Diego Méndez por un choque aéreo en la medular era ya digna de estudio. Ya con 9 en el campo y algún miembro del staff técnico expulsado por protestar, el desquiciamiento visitante era total. Quedando 7 más descuento, vio el Ursaria a su rival en el punto más vulnerable, y lo que hizo fue rematarlo.

A segundos de llegar al 90, los espacios generados en campo rayista propiciaron una contra que empujó a la red Escobar, bajo palos tras un pase de la muerte, y para más inri, en posición dudosa. La sal en la herida rayista no dejó de caer, pues en un descuento innecesariamente largo encajaría el 3-0 de la mano, o más bien el tobillo, de un ex, Villalón. El otrora central del Filial de la Franja empujó de espuela un córner puesto a media altura al primer palo cuando pasaban más de 5 minutos de añadido.

Mucho que decir y poco que contar. El Rayo B salió de Cobeña goleado por el líder y desquiciado por la labor arbitral, y con razón. Ya no queda otra que olvidarse de este mal trago y pensar en lo que viene. A falta de 9 fechas para acabar el campeonato, los de Iván Amaya van en 11ª posición con 25 puntos, luego de encadenar 4 partidos sin ganar (3 de los cuales derrotas) que les hacen quedarse 3 puntos por encima del descenso. Lo que viene es un duelo importante para salvarse de la quema, pues el domingo a las 11:30 el Alcalá visita la City.

Texto: Jorge Morales García

Imagen destacada: Carlos Villar