Hubo de todo menos goles

Hubo de todo menos goles

Trepidante partido el que Rayo B y Flat Earth empataron a 0 en la «City», con una mitad para cada equipo.

Ocasiones, dominio de uno y otro equipo, idas y venidas, tensión… De todo eso hubo en el partido que enfrentó a Rayo B y Flat Earth FC en la «City». Solo faltaron los goles, pues el 0-0 inicial se mantuvo cuando se acabó el encuentro.

Frío casi invernal y nubes grises acompañaban el ambiente en el campo 4 en el comienzo de un duelo por entrar en la zona noble del subgrupo VII A. Para tratar de que los puntos se quedasen en casa. Ángel Dongil introdujo dos cambios con respecto a la anterior jornada, metiendo a Gimeno por Rueda en el centro de la defensa y a Kevin por Boigues para correr por la banda derecha. Saltaron los del Filial de la Franja con camisetas en recuerdo de Quivira, Carlos Hernández y Aitor, sus compañeros lesionados de gravedad. Frente a ellos, el cuadro de Javier de Lucas,que venía de perder el liderato y dispuesto a recuperarlo cuanto antes.

Luego del minuto de silencio por Maradona, comenzó el encuentro. Toda la energía y el ataque en el inicio fue del Flat Earth, que se plantaba rápido en campo rival y ponía cerco al área de su rival, un Rayo B que si bien no se mostraba sorprendido, sí que no está tan acostumbrado a adoptar un papel pasivo en el juego, y menos aun en casa. Ya en los primeros minutos avisaron los de azul de sus intenciones con balones al área que buscaban la cabeza de Guadaño, pero que se quedaban en meros avisos.

El equipo vallecano no quería parecer inmutado por el alto ritmo que imponía el rival, y se empeñaba en sacar la pelota jugada desde atrás, pese a la fuerte presión que ejercían los atacantes visitantes. Aun con ello, no querían los de Dongil rifarla hasta que no fuera estrictamente necesario. De todo lo visto hasta ahora en la «City», se puede decir que el Flat Earth ha sido el mejor equipo que ha jugado en el verde artificial rayista hasta la fecha. Al menos, la versión suya que se vio de la primera mitad, que supo arrinconar a los de franjirrojo y que, de no ser porque Roberto le repelió un disparo franco a Díaz, habría encontrado la recompensa del gol.

Aun estando peor que su rival e incómodo con el juego, no significa eso que el Rayo B no tratase de atacar y no tuviese llegadas. Al contrario, tuvo sus oportunidades, menos que su contrario pero alguna bastante buena. Un muy activo Kevin se encontró con la rápida salida del meta Álex a taparle todos los huecos cuando se quedaba solo en el área. Y en el descuento, no acertó Marc Echarri a embocar entre palos un excelente centro raso de Iker al punto de penalti. Ocasión clara para acabar la primera mitad, y pese a todo, lo mejor para el Filial de la Franja era la llegada del descanso, pues se había visto superado por un intenso Flat Earth que había sabido cortarle las alas y meterle en serios apuros.

Algo de sol brillaba y calentaba la grada de la «City» en el inicio de la segunda parte. Como el tiempo, el juego del cuadro de Dongil mejoró sustancialmente desde la vuelta de vestuarios. Dando un vuelco a la dinámica, el Rayo B se lanzó a por la pelota y al ataque del área de un Flat Earth cuyo dominio del primer periodo quedó completamente sepultado. El intercambio de papeles era claro, con la nota negativa en los locales del cambio obligado de Iker, que dejaba con dolor su lugar a Boigues en el minuto 56, acabando de manera amarga la semana en la que había sido convocado con el primer equipo.

Ese cambio hizo que se fuese Luis Aguado a la banda contraria a la habitual para que Boigues y Kevin tuviesen la derecha para ellos. Lejos de alterar en demasía el juego, esta disposición propició los mejores minutos de los de la franja roja. Por el lateral nuevo de Luis, el izquierdo, llegó una bonita combinación entre Manu Navarro y Cano que terminó en centro raso para Marc, pero cuando armaba el remate el 9, Álex salió para abortarlo. No tenía el día Echarri, que al rato de esta acción sería sustituido por Molina, quien entró para dar energía en el último tercio de campo, y dejó varios detalles de calidad. También es digno de mencionar el trabajo en medio campo de Arratia, Capitán de la Franja que llevó sobre sus hombros la creación de juego franjirroja, en buena asociación con Sánchez y Manu.

En cuanto al Flat Earth, por los gritos que proliferaba el dueño de la entidad desde la grada se podía entrever que estaba decayendo en juego y presencia. Aun con todo, las animadas acometidas rayistas dejaban huecos que los terraplanistas trataron de aprovechar a la contra, con escaso éxito. Mientras, el Rayo B seguía tratando de romper el cerco del arco rival. Llegaron remates de Kevin y de Cano, pero no había manera. Se entraba en los 10 minutos finales con las piernas cansadas, las espadas en alto y el marcador sin moverse.

El último tramo de un encuentro bonito en lo futbolístico se vio muy envuelto por todo lo que había en juego y que finalmente nadie pudo ganar. El encuentro se abrió, quedando el medio campo totalmente roto y jugándose cada pelota como si fuese la última. Esto último se notaba especialmente en un Flat Earth incapaz de hilvanar jugadas como en la primera parte y que lo fiaba todo al balón largo ante un Rayo B que buscó llegar con la pelota en los pies al área contraria. Y algo de tensión hay que añadir en la ecuación, pues en el último cambio local vio amarilla Cano cuando se marchaba sustituido por Barroso, que entró a 3 del 90 para ayudar a conseguir un gol que se antojaba definitivo de llegar a caer.

En los 5 minutos que hubo de descuento, ya era el todo por el todo. El Filial de la Franja quiso llevar la batuta en el tramo definitivo, pero el partido acabó en el área local, en un córner que subió el portero a rematar y que sacó la defensa. Y cuando se emprendía la carrera al desguarnecido campo visitante, el árbitro decretó el final. Se retiraban los protagonistas reclamando algo a los colegiados de formas no todo lo adecuadas que podrían ser, como muestra que en el acta figure como expulsado el rayista Molina una vez acabado el encuentro. Desde nuestra posición es difícil saber lo que pasó, pero sí se puede intuir que tocará prescindir por sanción de un delantero que estaba empezando a tener un papel en el equipo y que no venía jugando mal.

En cuanto al resultado, fue 0-0. El partido tuvo de todo, menos lo que acaba contando en el fútbol, que son los goles. Se corta así la racha como local del Rayo B, que por primera vez acaba un partido como local sin llevarse la victoria. Aun así, mantiene el invicto ante un equipo muy fuerte, en el segundo encuentro seguido que acaba sin ver puerta el cuadro franjirrojo. Mantiene el Filial de la Franja la 4ª posición con 13 puntos, quedando a 1 de la 3ª plaza, que ocupa precisamente el Flat Earth. Ahora se vienen dos partidos fuera, el primero ante uno de los dos equipos que empatan en primer lugar, el Unión Adarve.

FICHA TÉCNICA

Rayo Vallecano B: Roberto (p.), Luis Aguado, Iker (Boigues m.56), Gimeno, Jorge Moreno, Arratia (cap.), Manu Navarro, Marc Echarri (Molina m.68), Cano (Barroso m.87), Kevin y Sánchez.

No utilizados: Quintela (p.s.), Aguirre, Nacho Fariña, Dani Moreno y Rueda. Entrenador: Ángel Dongil.

Flat Earth FC: Álex (p.), Lucas, Raúl Montero (cap.), Guadaño (Juanma m.34), Usi, David (Kunni m.83), Ángel, Adrián (Simón m.55), Busto, Nacho Gil y Díaz (Acha m.55).

No utilizados: Sebas (p.s.), Carlos, Pablo y Delu. Entrenador: Javier de Lucas.

Árbitro: Sr. Díaz Rodríguez. Expulsó con roja directa a Molina, del Rayo B, ya acabado el partido. Amonestó a Marc Echarri, Iker, Boigues, Sánchez y Cano en el Rayo B y a Nacho, Busto, Raúl Montero y Ángel en el Flat Earth, así como al delegado de equipo del Rayo B, Francisco José Meseguer.

Goles: 0-0.

Ciudad Deportiva Fundación Rayo Vallecano, evento a puerta cerrada. Partido correspondiente a la 7ª jornada del Campeonato Nacional de Liga, Tercera División, subgrupo VII A. Mañana fría y nubosa. Césped artificial en buenas condiciones para la práctica del fútbol. Antes del partido se guardó un minuto de silencio en memoria de Diego Armando Maradona.

Texto e imagen de Jorge Morales García.