Llegó la caída

Llegó la caída

El Rayo B sufre su primera derrota del campeonato en casa de un formidable Unión Adarve (3-0).

En un camino difícil de recorrer como es la Tercera División, por muy bien que se hagan las cosas, en algún momento se ha de tropezar. La primera caída del Rayo B llegó de la mano de un firme candidato al ascenso, el Unión Adarve, que demostró por qué está en todas las quinielas.

El frío y el viento hacían resentirse a los pocos privilegiados, compañeros de prensa y allegados de los clubes, que iban a presenciar el duelo por la zona noble que tendría lugar en el Vicente Del Bosque. A este partido llegaba la escuadra de Ángel Dongil en cuadro, con solo 6 suplentes disponibles, y haciendo algunos cambios en el once, siendo el más significativo la suplencia de Marc Echarri, siendo sustituido por Aguirre en la labor de referente ofensivo. Del lado local, se plantaba con todo el cuadro de Diego Nogales, capitaneado por Dani Ramos, quien en su momento llevó el brazalete del Filial de la Franja y sigue siendo el contundente y profesional central que vistió la Franja.

Desde el momento que la pelota echó a rodar, los del Adarve fueron lanzados a tratar de dominar el encuentro de la forma que les convenía, atacando con rápidez y eficiencia y defendiendo de manera escandalosamente firme. Así, pese a que el Rayo B tuvo más la pelota que en otras ocasiones en las que se veía inferior a su rival, no lograba acercarse al área con peligro, y cuando rondaba la zona de peligro, la pelota se iba muy por arriba en algún disparo forzado y lejano.

En los lobos, el peligro tenía el nombre de Nouman, que tuvo una muy buena ocasión en el principio del encuentro, recibiendo el balón donde Antoñín hizo el empate ante el Logroñés, solo que en este caso el remate no cogió puerta. Por el 9 rojinegro pasaban todos los balones de ataque, y también ayudaba a la fuerte presión en la salida de balón, que a punto estuvo de conseguir un premio para Maganto en una falta de entendimiento entre Rueda y Roberto que resolvió bien el portero. Todo iba sobre ruedas para el equipo local, a falta de la llegada del primer gol, y con el único contratiempo en forma de la lesión que obligaba a Dani Navarro a dejar el campo en el minuto 20.

Justo cuando parecía que el Rayo B empezaba a entrar en el partido, al instante de un tiro lejano de Aguirre que se fue cerca de la escuadra, llegó el anunciado gol rojinegro. Fue un balón rechazado del área que se puso raso desde el costado izquierdo. Nadie lo puede interceptar y en el segundo palo llega Montejo para empujarla a la red. Al minuto 25 llegaba la recompensa al dominio adarvista en forma de gol. Tratarían de responder los vallecanos, pero apenas encontraron huecos en la muralla local. La mejor aproximación la tuvo Luis Aguado en el costado derecho del área, con espacio para buscar el disparo, pero optó por buscar el pase de la muerte que fue rechazado a córner. Antes, pudo ampliar distancias el cuadro local en un par de ocasiones de Nouman, una un disparo alto desde la frontal y otra un cabezazo a las manos de Roberto. El 1-0 al descanso hacía justicia a lo visto en el campo, pero la corta ventaja podían hacer esperar una reacción del Filial de la Franja.

Buscó Ángel Dongil esa reacción metiendo a Fariña por Sánchez en el descanso, pero cuando apenas había comenzado la segunda parte, se topó el cuadro rayista con otra piedra que le provocaría la caída. En el primer balón al área visitante, en el primer contacto entre atacante y defensor, el primero se fue al suelo, y sin saber en la grada muy bien que pasó, en el campo el árbitro no dudó en señalar el punto de penalti. Ejecutaría la pena máxima Calleja, y de qué manera, cargando la barra de potencia de su pierna diestra y sacudiendo con violencia las telarañas de la escuadra derecha de un Roberto que se venció al lado contrario. Con apenas 2 minutos de segundo tiempo, el marcador se ponía 2-0, y el partido se le hacía muy cuesta arriba a los franjirrojos.

Aun con ello, no se arrugaron los de Vallecas, que trataron de dar su mejor versión en busca de un gol que les metiese en el partido. El balón se conducía con fluidez bajo la batuta de Manu Navarro y con la presencia omnipresente de un Iker Recio que si bien juega de lateral, hoy se transformó en todocampista, y hasta se animó con un libre directo junto al pico del área que se fue cerca del primer palo de la meta que defendía Víctor. Buscó Dongil poner al equipo en modo ultraofensivo con las incorporaciones de Dani García por Rueda primero y de Marc por Cano después, pero poco pudieron hacer ante la rocosa muralla rojinegra.

La idea del Rayo B de atacar a tumba abierta, dado el marcador adverso, conllevaba riesgos en forma de huecos atrás que un equipo formidable en el robo de balón como el Adarve podría aprovechar. Y en una de esas, la ley de Murphy se cebó con los visitantes. Una jugada en la que todo lo que pudo salir mal, salió mal. Un cambio de orientación en campo propio buscaba a Luis Aguado, pero este se resbaló y la pelota quedó a merced del recién incorporado Cañas, con metros por delante y un Roberto muy adelantado de la portería, porque había sido él el que comenzó la jugada que no salió. Con estos factores, el fresco dorsal 18 local tiró una vaselina preciosa por encima del portero rayista que se alojó mansamente en el fondo de la red para colocar el 3-0 en el minuto 68.

Estaba todo el pescado vendido, la caída del Rayo B era más que evidente. Para los últimos 10 minutos ingresaron Gimeno y Boigues por Arratia y Aguirre, dando entrada Dongil a todos los suplentes de campo que tenía a su disposición. El peso de las piernas y del resultado eran una losa enorme para el Filial de la Franja. Los lobos del Barrio del Pilar olieron sangre y acabaron el partido bien metidos en el área rival, buscando un cuarto tanto que ya hubiera sido de escándalo. Y casi lo consiguen, teniendo que meter Roberto el pie para rechazar el tiro a bocajarro de Quique Sánchez Flores (sí, el hijo) y paseándose la pelota varias veces por el área chica.

Terminó la contienda para regocijo local y tristeza visitante. Por primera vez en la temporada, el Rayo B sentía el sabor de la derrota, y lo sintió de forma contundente, cayendo a manos de un Unión Adarve llamado, si no a ascender directamente, a pelear por ello hasta el final. 7 partidos le duró el invicto al Filial de la Franja, que cae a la 5ª posición del subgrupo VII A con 13 puntos, siguiendo a 1 del tercer puesto tras su derrota ante el equipo que comparte el liderato con el Pozuelo. Fue dura la primera caída para los de Ángel Dongil, que algún día tenía que llegar. Pero toda caída da una oportunidad para levantarse, y el Rayo B tendrá la suya en 7 días, en su visita al San Fernando.

FICHA TÉCNICA

AD Unión Adarve: Víctor (p.), Dani Navarro (Miñambres m.20), Dani Ramos (cap.), Gerard, Cruz (Herranz m.79), Maganto (Cañas m.65), Salama, Nouman (Quique m.65), Calleja (Marti m.79), Gallardo y Montejo.

No utilizados: De Pablo (p.s.), Asensio, Riveiro, Herranz y Cáceres. Entrenador: Diego Nogales.

Rayo Vallecano B: Roberto (p.), Luis Aguado, Iker, Jorge Moreno, Arratia (Boigues m.80), Aguirre (Gimeno m.80), Manu Navarro, Cano (Marc Echarri m.64), Kevin, Rueda (Dani García m.55) y Sánchez (Nacho Fariña m.45).

No utilizado: Quintela (p.s.). Entrenador: Ángel Dongil.

Árbitro: Sr. Morona Del Campo. Amonestó a Maganto y Cruz en el Unión Adarve y a Sánchez y Arratia en el Rayo B.

Goles: 1-0, m.25, Montejo. 2-0, m.47, Calleja de penalti. 3-0, m.68, Cañas.

Centro Deportivo Municipal Vicente Del Bosque, evento a puerta cerrada. Partido correspondiente a la 8ª jornada del Campeonato Nacional de Liga, Tercera División, subgrupo VII A. Mañana soleada y fría. Césped artificial en condiciones óptimas para la práctica del fútbol.

Informó Jorge Morales García. Imagen de Miguel Ángel Mena.