Cuando fuimos Reyes

Cuando fuimos Reyes

6 de enero de 1997. Los Reyes Magos ya han visitado las casas de los niños españoles. Sin embargo, en el Palacio de los Deportes, la solidaridad no termina nunca. Y el Rayo se corona campeón por encima de los inalcanzables gigantes.

Existe un campeonato que el Rayo tiene en sus vitrinas y sus vecinos, Real Madrid y Atlético, no. Y no un torneo cualquiera, sino un que se jugó sobre parquet, con las normas del fútbol sala y con carácter puramente solidario. En el año 1997, el diario Marca y la cadena autonómica Telemadrid lanzaron una iniciativa deportiva, bajo el nombre de La Fiesta de la Solidaridad, con el fin de recoger juguetes para las familias en riesgo de pobreza de la Comunidad de Madrid. El 6 de enero, el Palacio de los Deportes fue testigo de una fiesta única, cuyo colofón era un triangular de fútbol sala entre las tres plantillas madrileñas de la Primera División del fútbol español.

Entrada para el evento celebrado en el Palacio de los Deportes. © Ismael Guti (@ismael7786)

Real Madrid, Atlético de Madrid y Rayo Vallecano se enfrentarían, todos contra todos, en partidos de un solo tiempo de 25 minutos. 11000 personas llenaron la grada del recinto deportivo para ver el torneo. Antes, además, también se pudo ver en directo un partido de la Selección Española de fútbol sala y varios encuentros de niños de categorías inferiores. El Rayo llegaba atravesaba la zona tranquila en la Liga, en un más que meritorio duodécimo puesto, mientras que el Real Madrid (1º) y el Atlético (5º) peleaban por el título y por las posiciones que otorgaban billetes a Europa en junio.

Tensión nivosa entre Rayo y Sevilla

El Real Madrid había vencido la tarde anterior, en la jornada 18 de Liga, al Athletic (1-0) con un solitario gol de su capitán Raúl González Blanco. Por su parte, el Atlético de Radomir Antić se había adjudicado un maravilloso partido contra el Extremadura en el Francisco de la Hera (2-4) con un doblete de Kiko en apenas dos minutos y dos tantos de Juan Carlos y Prodan. Los franjirrojos, en cambio, no habían podido disputar su encuentro contra el Sevilla por el ingobernable manto de nieve que había cubierto Madrid y que imposibilitó, según el acta arbitral de Puentes Leira, la práctica del fútbol en el Estado de Vallecas. Una decisión que provocó un conflicto entre los dos conjuntos: los hispalenses aprobaron de buen grado la suspensión para recuperar efectivos cuando se disputase el partido, mientras que el Rayo no quería que se aplazase y propuso jugar esa misma tarde o al día siguiente, algo que no se dio por la negativa del conjunto sevillano. La plantilla franjirroja llegó a entrenar sobre la nieve durante media hora para demostrar que sí se podía disputar el partido.

En la previa de aquel encuentro se decía que si el Sevilla no ganaba al Rayo, su entrenador, José Antonio Camacho, sería destituido. Desde el entorno rayista se dejó caer que la influencia del propio Camacho sobre el colegiado había sido determinante para forzar la decisión. La situación se tensó entre los dos clubes, cuyos capitanes cruzaron declaraciones. “El Sevilla tenía muchas bajas y, seguramente, habrá forzado la situación”, acusó Cota. “Igual pensaban que solo veíamos la nieve en foto y no queríamos jugar por eso”, respondió Manolo Jiménez.  Por su parte, un grupo de aficionados del Rayo despidió con bronca al Sevilla cuando marchó del estadio tras la suspensión. Finalmente, el duelo entre vallecanos y sevillistas se disputaría el 5 de marzo con victoria de los franjirrojos por 2-0 con goles de Klimowicz y Guilherme y ya con Julián Rubio como entrenador del conjunto visitante, previo paso fugaz de Carlos Salvador Bilardo, y con Fernando Zambrano como sustituto del destituido Paquito en el banquillo local.

Y llegó el torneo…

Se puede decir, por tanto, que el Rayo llegó a ese torneo solidario de Marca más descansado que sus oponentes. Sin embargo, la brecha de calidad entre las tres plantillas era inmensa y lo normal hubiese sido que alguno de los dos grandes se hubiese impuesto con solvencia al equipo de Paquito. Sin embargo, a las 18:05 horas, cuando comenzó la participación rayista en el triangular, las fuerzas se igualaron en ese intenso cinco contra cinco sobre el parquet. La primera contienda enfrentó al Atlético de Madrid contra el Rayo. Y el campeón de Liga y Copa no pudo doblegar a los vallecanos. El encuentro terminó con empate a 3 tantos en el marcador, lo que otorgaba un punto a cada uno de los contendientes. El segundo partido lo disputaron Rayo Vallecano y Real Madrid. El líder partía como clarísimo favorito, pero sobre la cancha, el 5 de los vallecanos, para el que Paquito fue repartiendo los minutos entre los 15 integrantes del plantel, fue netamente superior y consiguió la victoria por 3-2 con una actuación estelar del capitán Jesús Diego Cota y el golazo del torneo a cargo del central Ramón De Quintana. El Rayo sumaba dos nuevos puntos y se colocaba con tres en el casillero, fuera del alcance del club merengue y en la mira del Atlético de Madrid, que, si ganaba a su eterno rival, empataría con los franjirrojos.

Ya en la grada, a las 19:05 horas, los vallecanos asistieron al encuentro definitivo: el que podía coronarlos como campeones del torneo de fútbol sala. Todo quedaba en manos de madridistas y colchoneros. Un duelo entre los indios, últimos campeones de Liga, y entre los que brillaban figuras como Caminero, Solozábal, el gran Milinko Pantic, Vizcaíno o Molina, entre otros, y los vikingos, líderes del campeonato actual, con tipos como Redondo, Mijatovic, Súker o Raúl en su convocatoria. El encuentro terminó con la victoria del Real Madrid por 1-2, un resultado que, lejos de satisfacer a ninguno de los dos clubes, coronó al Rayo Vallecano. Los de Vallecas obtuvieron 3 puntos, frente a los 2 del Real Madrid y el punto cosechado por el Atleti, y se coronaron, invictos, como primer y único campeón del Torneo de Fútbol Sala de la Solidaridad organizado por el diario Marca y Telemadrid.

Un campeonato del que solo el Rayo puede presumir y que no volvió a repetirse, pese al notable éxito de aquella primera edición de 1997. En la retina de los más veteranos queda la imagen de jugadores como Contreras, Miguel Ángel España, Ezequiel Castillo, De Quintana, Cota, Cortijo, Martín González, Moreau, un recién llegado Yassine Abdellaoui, el canterano Míchel o Guilherme recogiendo las felicitaciones de las autoridades y coronados como vencedores mientras los transatlánticos madrileños aplaudían su victoria. Una gesta irrepetible. Cuando fuimos Reyes.

Imagen de portada: Recorte del diario Marca del 6 de enero de 1997, en el que se anuncia la Fiesta de la Generosidad con la imagen de los jugadores de los tres equipos.

© Ismael Guti (@ismael7786)