94 minutos y 40 segundos de lucha, 20 segundos de dignidad

08/11/2021
94 minutos y 40 segundos de lucha, 20 segundos de dignidad

Las futbolistas del Rayo Femenino han dicho basta y alzan la voz para denunciar las pésimas condiciones laborales que tienen en el Rayo Vallecano.

El pasado sábado en Valdebebas vivimos una de esas situaciones que no es nada agradable para el espectador, sean los que sean tus colores y menos si la potagoniza tu propio equipo. El Rayo Vallecano Femenino sacaba de centro y decidió que iba a parar los primeros 20 segundos de juego como protesta por la situación en la que se encuentra el equipo. El Real Madrid no solo entendió la postura de sus compañeras, sino que secundaron este parón de las franjirrojas (ves como no era tan complicado, Onésimo).

Después de este gesto, lo futbolístico pasa a un segundo plano cuando se trata de una situación tan compleja como la que están padeciendo jugadoras y cuerpo técnico del Rayo Vallecano Femenino. Aún así, las guerreras volvieron a dar la cara durante los 95 minutos que duró el choque (exceptuando los 20 segundos del parón) y no estuvieron muy lejos de salir de Valdebebas con algún punto en la mochila, algo que, tal vez, hubiese jodido a los detractores, haters y entendidos de fútbol que pululan en redes sociales (sin cierta gente, el mundo tuitero sería un lugar maravilloso).

Si esos 20 segundos nos pareció poca muestra de dignidad por parte de nuestras guerreras, finalizado el partido las jugadoras subían a sus redes sociales un comunicado en el que denuncian la situación laboral que sufren en el Rayo Vallecano. Comunicado que firmaban de forma conjunta con el sindicato de futbolistas AFE, algo que, conociendo al elemento en cuestión, habrá amargado la comida previa de su visita al Bernabéu al dueño del cortijo y se habrá transformado en alguno de los entrañables Bill Murray, Dan Aykroyd o Harold Ramis en Los Cazafantasmas. No descarto que en las próximas horas nos encontremos con alguno de sus habituales comunicados en los que desmienta todo lo denunciado por las futbolistas y cargue contra el demonio Aganzo y su sindicato judeo-masónico que conspira contra él.

Lo que está claro es que las guerreras han decidido dar un paso adelante y luchar por una serie de condiciones que cualquier empresa debería cumplir con sus empleados y que el Rayo Vallecano cumple religiosamente, pero tan solo con una serie de trabajadores a los que les da un estatus de privilegiados. Por suerte, estos mismos trabajadores han demostrado que están al lado de sus compañeras y varios de ellos subieron a sus redes sociales el comunicado de las jugadoras y mostraron su total apoyo a éstas. ¿Se atreverá a cazar fantasmas también con ellos? Seguro que no, este señor no ha debido ser nunca jamás el primero de la cola en la que se repartía la valentía.

En Vallecas no tenemos títulos (tampoco los queremos prestados o regalados, Tomás Guasch) ni sabemos de finales de grandes competiciones, pero si nos hablan de dignidad y orgullo, podemos competirle de tú a tú a cualquiera. Nuestras futbolistas han demostrado en 20 segundos tener bastante más dignidad que aquellos que la venden por una invitación al palco de Vallecas o le ponen precio por una camiseta regalada de Falcao. Sigan maquillando la gestión de del señor Presa con artículos de arcada fácil o editoriales televisivos con las bondades ficticias de un presidente que, año tras año, maltrata a todo aquello que no huela a la Liga que dirige su musa, Javier Tebas.