Como un funambulista temeroso por el foso que lo contempla, atraviesa el Rayo Vallecano la superficie de los hilos que aún sobreviven a Javier Tebas y sus devastadores, agresivos e indecentes horarios. Esta vez, serán franjirrojos y pepineros quienes sufran su nefasta gestión.
Debería este precioso derbi madrileño remitirse a lo meramente deportivo, a un duelo en el que ambos conjuntos se juegan mucho más que tres puntos, pues es la permanencia, el sueño, lo que se disputa en el día de hoy. Es por ello por lo que durante ochenta y ocho minutos el terreno de juego será protagonista, reservando, eso sí, dos de ellos a la reivindicación de la media vuelta, al dar la espalda a La Liga y sus derechos televisivos.
El choque que dará comienzo a partir de las 21:00 en el Estadio de Vallecas será una auténtica ruleta rusa para el conjunto local, no sólo por el indudable descenso de público que existirá, sino también por las adversidades futbolísticas, con la medular como protagonista.
A raíz de la suspensión por acumulación de tarjetas de Santi Comesaña, urge encontrar la pieza que haga olvidar al, posiblemente, mejor jugador de la temporada. El primer disparo lleva el nombre de un Jordi Amat que, pese a haberse consolidado como un indiscutible integrante de la zaga, podría incorporarse a la posición de pivote. El segundo, con Álvaro Medrán como opción, supone la inclusión de un jugador en forma, pero alejado del once titular y, en cierto modo, cercano a un perfil más constructivo. El tercero, quizá más arriesgado, incorporaría a José Ángel Pozo entre los titulares, retrasando así a Gianelli Imbula al mediocentro defensivo.
Teniendo en cuenta estos factores, el club vallecano buscará dormir por segunda jornada consecutiva fuera del descenso, con una victoria que lo coloque en la cifra de veintiséis puntos. De conseguirse el objetivo, además, sería el quinto triunfo en seis partidos y, con ello, el sexto encuentro consecutivo sin conocer la derrota. Cabe destacar que en la nómina de futbolistas no se encontrarán el mencionado Santi Comesaña y Bebé, ambos sancionados.
Los hombres de Pelegrino, por su parte, se ubican en la decimoséptima posición, pero empatados a puntos con los locales. Tras empatar épicamente ante el Eibar la pasada jornada, los blanquiazules suman dos encuentros consecutivos sin ganar, con una sola victoria en los últimos siete choques disputados. Además, los pepineros deberán contar con las bajas de Carrillo y Nyom.
El destino no está ni mucho menos escrito, al igual que la suerte no está en absoluto echada, pero trenes no sobran y hoy pasa uno de ellos. El revólver se encuentra ya cargado con una bala que deberá solucionar las carencias de cara al vital duelo ante el club leganense. Una oportunidad, una bala, un gatillo y, en la empuñadura, el mejor tirador posible para apretarlo.