El técnico ha comenzado de forma oficial su segunda etapa en el banquillo rayista en una rueda de prensa marcada por las intervenciones de Presa sobre el descenso de 2016.
Menos de 24 horas después de la confirmación de su regreso y tras 2 sesiones ejerciendo como tal, Paco Jémez ha comenzado formalmente su segunda etapa como entrenador del Rayo con una rueda de prensa en la «City».
El llenazo que presentaba la sala de prensa era una muestra perfecta de la expectación que generaban las posibles primeras palabras de Jémez en su retorno al banquillo franjirrojo. Acabó apareciendo, acompañado por miembros de su cuerpo técnico, que ocuparon la primera fila de asientos, y por el presidente del club Raúl Martín Presa, quien se sentó a la derecha de Paco en la mesa después del protocolar posado de ambos sosteniendo una camiseta de la Franja.
El primero en hablar fue Presa, quien de forma muy breve quiso disculpar la ausencia de David Cobeño, director deportivo del club, por «razones de fuerza mayor», así como agradecer a Míchel el trabajo desempeñado al frente de la nave rayista. Después, habló de que Jémez era el hombre idóneo para «el cambio que hace falta» dada la delicada situación del primer equipo masculino, penúltimo y a 6 puntos de la salvación con 10 jornadas para acabar la temporada.
Le llegó el turno de hablar a Paco Jémez. El canario aseguró sentirse «como en casa» en el Rayo, donde ha sido jugador y entrenador, y ha admitido que su marcha en 2016 tras consumarse el descenso a Segunda fue «uno de los errores más grandes de su vida», y que por ello no le ha costado nada volver a Vallecas. Asegura Paco que siempre ha sentido un buen trato por parte de toda la gente que forma el Rayo, ya sean empleados del club o aficionados.
En el inicio del turno de preguntas ha empezado a dibujar el míster el Rayo que quiere, que según dice «hay posibilidades para salvarse, pero nuestro mayor enemigo es el tiempo». Jémez ha hecho especial hincapié en «recuperar anímicamente» a unos futbolistas que vienen soportando una losa de 7 derrotas seguidas. Luego más tarde trataría sobre su particular estilo, asegurando que «no es muy distinto al de Míchel», a quién además se ha referido como «un buen amigo y un gran entrenador».
De un tiempo a esta parte, Paco Jémez ha querido dejar constancia de que estaba siguiendo al Rayo desde la distancia. Dice tener algo de trabajo avanzado porque «he podido ver el 90% de los partidos, así que conozco al equipo», amén de que hay hasta 11 jugadores de la actual plantilla que ya estuvieron a sus órdenes, ya fuera en Vallecas o en otro club. Quiere Jémez que todos remen a una para lograr un objetivo que ha definido a regañadientes como «milagro deportivo», y sabe que para ello el Rayo ha de ser valiente y todo el rayismo ha de virar para mantener el barco a flote, ya que la afición «no te permite rendirte».
Con la afición, o al menos parte de ella, ha tenido que ver el momento más tenso de los 40 minutos de comparecencia de Jémez. Un compañero de televisión le preguntó al entrenador su opinión sobre un comunicado firmado por 6 peñas rayistas y por Bukaneros en el cual muestran su rechazo al retorno de Paco al banquillo, alegando que desde el momento y las formas en las que se fue en 2016 hasta algunos actos sucedidos desde entonces no se le puede considerar «digno de los valores del rayismo». Jémez ignoraba la existencia de este comunicado, el cual ha leído en plena rueda de prensa tras entregárselo el compañero que hizo la pregunta. Respondió que «no sé por qué debo pedir perdón», e invitó a los firmantes a que vinieran a la «City», se reunieran con él y lo hablaran, y que llegado el caso «no me dolerán prendas en pedir perdón».
Podría haberse zanjado ahí la cosa, pero quiso tomar la palabra Raúl Martín Presa. El presidente del club ha defendido la profesionalidad de Paco Jémez en la temporada del descenso, del cual achacó la responsabilidad a «cosas que sucedieron en El Molinón (en el famoso Sporting-Villarreal de la última jornada) que no deben de suceder en el deporte limpio» y a la falta de responsabilidad de «algunas personas del club en ese momento, que por ello ya no están y no estarán jamás mientras siga yo aquí». Defendió Presa que Jémez «quiso seguir en el Rayo en Segunda, pero no se llegó a un acuerdo y cumplió su contrato», y justificó su vuelta diciendo que «queremos recuperar los valores del club de valentía, coraje y nobleza» y que si el Rayo baja ha de ser «dejándolo todo», cosa que no vio esta temporada en los partidos jugados en Getafe y Villarreal.
Después del revuelo provocado por el presidente, continuó con relativa normalidad la ronda de preguntas a Paco Jémez, abordando más dudas tácticas y como trabajará con otros estamentos del club, como será su relación con la cantera e incluso con el Rayo Femenino. Con una nueva repregunta a Presa sobre la rajada anterior acabó la rueda de prensa.
Prometía el acto de presentación de la vuelta de Paco Jémez al banquillo del Rayo Vallecano, y no decepcionó. 40 minutos en los que el técnico canario ha querido mostrar que buscará por todos los medios que Vallecas siga siendo de Primera, pero aunque parezca imposible, hoy sus palabras han sido eclipsadas por otro interlocutor, y no uno cualquiera precisamente.
Escucha el acto de presentación de Paco Jémez al completo aquí:
Texto e imagen de Jorge Morales García.