El canalla Alberto Leva nos trae su particular repaso semanal a la actualidad de la franja.
Ya tenía ganas de abrir mi sección un lunes y que de verdad fuera un «lunes al sol», es decir, que me pudiera sentar al sol en un banquito delante de una obra -abandonada hace seis meses- y, entre párrafo y párrafo, echarle unos tarugos de pan a las palomas que desafían al espantapájaros XXXL del banco.
Lo de escribir en la calle tiene su punto, porque los jubilados rayistas son infinitamente más ingeniosos que un servidor. De hecho, pensaba titular el análisis del primer equipo «Regalos Todo a 100 Qbao«, pero mi primer compañero de banco, hablando sobre el partido del sábado, me repetía bastante cabreado que «la defensa del Rayo son unas madres». Por lo tanto, y como la experiencia es un grado, el título debía ir por ahí.
El «Día de la madre» rayista
Como suele ocurrir partido tras partido en Vallecas, el pasado sábado también se homenajeó a una santa madre. Si quince días antes había sido a la de Carlos Bacca, y anteriormente fue a la de Paco Alcácer, en esta ocasión no iba a ser menos la de Sergio García.
A los ocho minutos ya le había dedicado un gol que le sirvieron en bandeja entre Cristian Álvarez y Tito, en otra falta de entendimiento y en la que el trencilla de turno no ve la clara agresión del portero argentino al lateral. Una agresión, por cierto, que seguro que Paco Jémez vio desde el banquillo y de la que habrá tomado buena nota. A Cristian -único portero de su país que no usa la rodilla a la hora de salir por alto- le llegará su correspondiente «recetita made in Jémez» por haber atacado al capitán de su equipo que además es un capitán de los de antaño, con su barba poblada y tuneada con ese color rojizo que impone más respeto aún.
Al final, con semejante desconcierto defensivo, el bueno de Sergio García no sabía si ir a celebrarlo con Tito y Cristian o con sus propios compañeros. Lo que es seguro es que en lugar de hacer un corazón con los dedos de esos que están tan de moda ahora, el delantero se golpeó el pecho y gritó a alguna cámara cercana un «¡Va para ti, madre!».
Viendo la alineación, hasta el más viejo del lugar -véase mi vecino de banco hoy- intuía que lo de colocar a tres laterales en una defensa de tres sólo lo haces en el Comunio cuando andas jodido de pasta y fichas a lo loco como hace el señor Sergio Cano, por ejemplo.
Como no todo van a ser palos al bueno de Paco, en su haber voy a destacar la titularidad de tipos como Jozabed o sobre todo del «guaperas» Álex Moreno, lo que demuestra dos cosas: que hay otras alternativas a «lo de siempre» y que además escucha con atención el programa de radio MATAGIGANTES, donde ya pedimos la titularidad para ambos. Además, en ambos casos han justificado con su fútbol esa petición, lo que hace que por ejemplo a Álex le admire ahora a partes iguales, como futbolista y como latin lover.
Se armó el Belén
Que a los «zumbados» de MATAGIGANTES nos gusta lo retro o vintage es más que evidente, teniendo en cuenta que nuestro presentador es todo un FILF o que el coche de mi colega Álex Calvo es más propio del Museo de Ángel Nieto que de un tipo de su clase y estatus social.
Pero en este caso no voy a hablar del peliculón del gran Paco Martínez Soria, sino a decir que el título tiene más que ver con nuestro filial y el problema que se nos plantea con dos de sus «cachorros», porque el miércoles pasado tuvimos como invitados al capitán «Touré» Arranz y Alberto «el Chino», nombres de película de pandilleros de los ochenta y que junto al resto de la pandilla del Rayo B se hicieron con el botín de los tres puntos en Zubieta el sábado.
Por antecedentes, por ganas de que así fuera y, si se me permite, por cierta chulería vallecana, nos atrevimos a decirle a estos dos jugadores que MATAGIGANTES les iba a dejar bendecidos, que se iban a cascar un partido de esos de escándalo y que nos atrevíamos a aventurar a que el pobre «Chino» no iba a tener que cambiarse el apodo a «el Boquerón» por haberse pasado los partidos anteriores más tiempo en la red que en la portería, dado que iba a venir con el historial inmaculado de goles en contra.
Dicho y hecho, partidazo en Zubieta y nuestro «Chino» se marca una actuación descomunal, al igual que el resto del equipo. Hasta aquí puede parecer todo normal y quedarse en una anécdota, pero lo jodido del asunto es cuando te llaman los dos y te dicen que el miércoles que viene repiten radio y programa, detalle para nada relevante si el miércoles no fuera Nochebuena, algo que tratamos de explicar a ambos y que pensábamos que entenderían y lógicamente les haría cambiar sus planes. La respuesta en los dos casos ha sido idéntica: «estamos en racha y si hay que sacrificar la Nochebuena por el Rayo, se hace». Así que tendremos un problema curioso con la familia Arranz Albertos y con los Díaz Ortiz, que no sabemos como resolver y que tiene pinta de terminar con una cena de Nochebuena al más puro estilo «la cocina de los Serrano a la hora del desayuno».
En cualquier caso, queda claro que nuestros Matagigantes navideños y de la semana no pueden ser otros que los chicos del Rayo B, ya que nuestra «banda del bate» juvenil tuvo un «gatillazo» en casa y nuestras guerreras franjirrojas dieron la cara como siempre, pero el Barcelona es mucho Barcelona. Por cierto, aprovecho este artículo para desear que nuestra guerrera Marta Costa se recupere lo antes posible de su lesión.
Aprovechando que a mi compañero de banco le ha salido una timba de tute irrechazable y ha decidido abandonarme, termino yo también estas líneas deseando una Feliz Navidad a todo «bicho» rayista viviente, esperando que en 2015 sigamos disfrutando de nuestro Rayo, de MATAGIGANTES y de mis Lunes al sol.
Alberto Leva