El Rayo B tropieza en La Mina ante un Real CD Carabanchel que salió en tromba en la segunda parte y logró una victoria balsámica (2-0).
Cuando la batalla física y deportiva está igualada, la fe y la constancia suelen desequilibrar la balanza. Así pasó en el duelo entre Real CD Carabanchel y Rayo B, que el cuadro local se lo creyó más y acabó doblegando a los de Vallecas (2-0).
Pese a las nubes y el aire frío, se respiraba un ambientazo en La Mina que recordaba al fútbol de antaño, aquel al que jugó Félix Bardera «Felines», leyenda blanquinegra y rayista, que fue homenajeado en los prolegómenos del encuentro, antes de guardarse un minuto de silencio por el malogrado socio del Carabanchel «Ruper».
Después del ceremonial, el fútbol. Empezó el duelo muy igualado, dado que nadie se podía permitir perder, ni el «Cara» si quiere aspirar a mantenerse en Tercera ni el Filial de la Franja para no perder la estela de la zona alta de la tabla. Así transcurrió la media hora inicial, con el balón que no paraba entre un campo y otro, y apenas tocaba el césped artificial, pues gran parte del juego era por alto.
Pasado el minuto 30, y todavía sin haber un equipo que terminase de coger el toro por los cuernos, llegaron las escasas ocasiones del primer tiempo. Lo intentó primero el Rayo B, o lo que es lo mismo, Adrián Carrasco. Aunque sus compañeros de la delantera Álvaro Juan y Sergio Moreno participaban en la elaboración de las jugadas y buscaban la manera de desmarcarse, fue el «pichichi» rayista el que tuvo las mejores oprtunidades en un par de disparos, el primero casi sin ángulo y que se perdió por arriba y el segundo tras una buena conducción por la izquierda hacia una zona de disparo más centrada en la frontal y que obligó a intervenir al meta local Molina. En el Carabanchel, y casi en el descanso, metió el miedo en el cuerpo Camilo con un disparo lejano que obligó a Morro a mandarlo a córner, el cual no lo terminó de sacar la defensa y acabó en chut desviado a saque de puerta. El 0-0 con el que se llegó al descanso hacia justicia al partido que se estaba viendo: abierto y dinámico, pero con poca presencia en las áreas.
Aquí solemos contar que hay un arreón del Filial de la Franja en el inicio de la segunda parte, pero esta vez sucedió todo lo contrario. El Carabanchel encaró los segundos 45 minutos con la convicción de que era el día para poner fin a la sequía de victorias tan larga que vivían, y tanto se creyó el cuadro blanquinegro que podía ganar que lo acabó logrando. Los 10 minutos iniciales de la segunda mitad fueron un monólogo de los de la Cruz de Santiago, encerrando atrás al Filial de la Franja y ganándole en su propio juego, el de la posesión y el control del juego.
Tanto rondó el cuero el área visitante que acabó por entrar en la red. El golpe fatal que rompería el cántaro fue cuando Roberto Sánchez, con su primer cambio, retiró a Greciano para dar entrada a Torres. Para el 9 carabanchelero fue llegar y besar el santo cerca de llegar a la hora de juego. Sacó el «Cara» un saque de banda en el costado izquierdo en la zona paralela al área, o lo que es lo mismo, un córner con las manos. El balón cayó hacia el lateral del área chica, donde prolongó de cabeza el capitán local Jaime para que cayese en el corazón de la pequeña, donde encontró Torres su primer balón del encuentro, el cual no tuvo más que empujar ante una portería a su completa merced. Euforia en La Mina al ver que se adelantaba el Carabanchel en el 58 del partido, de forma más que merecida además. La grada, como su equipo, se creyó que sí se podía.
Como reacción a un panorama nada agradable, casi al instante de encajar el gol empezó a mover el banquillo Luis Cembranos, metiendo a Ángel Algobia en lugar del recién llegado Guille Nieto y a Oliva por Álvaro Juan. Necesitaba el Rayo B volver a ser el equipo que es y buscar la reacción. Ganó más en terreno y en posesión de la pelota, pero ya fuera por ansia propia o celosa defensa rival, no terminaba de generarse peligro real sobre la meta de un Molina que dio el gran susto de la mañana. Salió el portero a rechazar de puños un posible remate de cabeza de Kike Hermoso a una falta lateral, pero acabó chocando y la caída resultó peor de lo que parecía. Estuvo Molina bastante aturdido, teniendo que detenerse el juego durante varios minutos e incluso llegando a calentar Adrián, portero reserva del «Cara», pero afortunadamente no pasó a mayores.
Corría el reloj demasiado rápido para el Filial de la Franja, que insistía pero no lograba salvar los muebles. Al entrar en el cuarto de hora final entró «Killer» por Dani García, quemándose así los cartuchos disponibles para buscar el gol que sirviera para sacar algo positivo de La Mina. Estaba completamente volcado el Rayo B sobre el campo de su rival llegado el tramo final de un partido que parecía encaminarse a un final incierto y emocionante con descuento largo. Pero 2 minutos antes de mostrarse el cartelón que daba inicio a los 6 minutos de tiempo añadido, todas esas perspectivas volaron por los aires. El despeje de una falta que trataba de meter el Filial de la Franja en el área local inició una contra frenética conducida por Vera, quien había salido apenas 5 minutos antes y estaba fresquísimo para correr por el costado izquierdo más de 50 metros casi sin oposición. Cuando llegaron los centrales a la cobertura, ya estaba Vera en el pico del área visitante, y ahí se la cedió hacia el medio a Vera, quien recibió de espaldas al marcoy marcado por Algobia, pero con un par de fintas de 9 de raza se deshizo de su defensor y la colocó donde Morro no pudiera alcanzarla, alojándola en el fondo de la red y poniendo fin a la historia. El doblete de Torres sobre la hora valía mucho para el Carabanchel, por ello fue celebrado en la grada de La Mina y con excesiva euforia en el banquillo local, pues fueron amonestados 3 jugadores suplentes tras el festejo.
Ya solo quedaba el trámite del descuento por pasar para que se materializase la primera victoria del Real CD Carabanchel en meses y la cuarta derrota consecutiva como visitante de un Rayo B que pagó cara la «empanada» del comienzo del segundo tiempo. El cuadro local lo necesitaba más, se lo creyó más y al final sumó el triunfo. Este tropiezo deja al Rayo B 11º con 31 puntos, a 10 de la zona del playoff y 11 por encima del «Cara», 4º por la cola y mejor equipo de los que ahora mismo bajarían a Preferente. En esa zona peligrosa está bien inmerso el CF Pozuelo, equipo que visita la «City» el próximo domingo.
FICHA TÉCNICA
Real CD Carabanchel: Molina (p.), Jaime (cap.), Greciano (Torres m.56), Camilo (Vera m.83), Imanol, Olmos, Nico, Marvin, Chino, Miguel Ángel y Edu Río (Guacho m.67).
No utilizados: Adrián (p.s.), Rubén, Antonio y Viti. Entrenador: Roberto Sánchez.
Rayo Vallecano B: Miguel Morro (p.), Meseguer, Pipe Sáez (cap.), Kike Hermoso, Martín, Dani García («Killer» Bercedo m.76), Álvaro Juan (Oliva m.61), Guille Nieto (Ángel Algobia m.59), Sergio Moreno, Alberto y Carrasco.
No utilizados: Dani Merino (p.s.), Javi Rubio, Félix Ledesma y Migallón. Entrenador: Luis Cembranos.
Árbitro: Sr. Barranquero Sánchez. Amonestó a Camilo, Nico, Molina, Olmos, Greciano, Rubén y Antonio en el Carabanchel y a Sergio Moreno en el Rayo B.
Goles: 1-0, m.58, Torres. 2-0, m.88, Torres.
Campo de La Mina, unos 500 espectadores. Partido correspondiente a la 24ª jornada del Campeonato Nacional de Liga, Tercera División, grupo VII. Mañana nubosa y fría. Césped artificial en condiciones mejorables para la práctica del fútbol. Antes del partido se homenajeó a Félix Bardera «Felines», presidente de honor del Rayo Vallecano y ex jugador del Carabanchel; y se guardó un minuto de silencio en memoria de «Ruper», socio del Carabanchel recientemente fallecido.
Informó Jorge Morales García. Imagen de Iván Díaz.