El Juvenil A vuelve a sonreír

22/02/2021
El Juvenil A vuelve a sonreír

Victoria tan necesaria como merecida para los pupilos de Iván Ama

El partido de División de Honor Juvenil disputado entre Rayo Vallecano y Extremadura ha acabado 3-1, marcado por la expulsión de un jugador visitante a los pocos minutos del encuentro y que ha propiciado una tónica de dominio para el conjunto local, que en líneas generales del partido ha conseguido dar su mejor imagen.

Un juego vertical junto a una alta intensidad ha sido el cóctel perfecto para dejar sin opciones al equipo rival. El Extremadura ha intentado reponerse, pero era más que evidente que este error les iba a pesar, sumado a dos posibles penaltis a favor que no han sido pitados, la polémica arbitral iba estar a la orden del día. Tras esta victoria el Rayo recupera un poco de confianza y consigue alcanzar la sexta posición, que le permite estar en la pelea por la parte más alta de la clasificación tras la racha negativa que este equipo arrastraba al inicio del campeonato.

Los primeros 45 minutos se han desarrollado en torno a una mano que marcó el partido. El penalti se produjo en una contra de una falta lateral, que tras una gran intervención del portero, dejó el rechace para que el delantero rayista fuese a marcar a placer y un defensa lo interceptase de manera voluntaria y provocó esa decisión del colegiado a pesar de las protestas de los demás compañeros. El penalti fue transformado por el capitán del equipo, Asier, una de las figuras del partido.

Por su parte, el Rayo ha jugado bien sus cartas, ha sido en todo momento el equipo dominador, teniendo ocasiones muy claras, aunque no se han transformado en gol.

La superioridad de los vallecanos por banda era continua y así lo ha sido a lo largo del partido. Jugadores como Diego, Asier y Cano han sido de lo más destacado en la primera parte al ser los más partícipes en el juego. El Rayo ha propuesto un juego desde atrás, manteniendo el balón y buscando los espacios cuando el equipo extremeño no le iba a presionar. Pero algo a destacar es que dónde más ha generado peligro, ha sido mediante la presión tan alta que ha provocado robos en zona de medio campo y tres cuartos del rival dejando a la defensa en inferioridad en constantes ocasiones.

Por su parte, el equipo visitante se ha visto superado en todos los duelos individuales y no conseguían estar cómodos en el juego por las pérdidas continúas en el medio. Lo único a destacar de este equipo, en este tramo, han sido las dos posibles manos a su favor. La primera se reclamó que un jugador del Rayo tocó con la mano para controlar un balón dentro del área y la segunda y la más polémica, un disparo del 9 del Extremadura, Hoyos, que impactó en el larguero y que reclamaba con ímpetu que había dado primero en la mano del defensor y después en la madera

La segunda parte comenzó con una clara ocasión para el equipo franjirrojo donde un pase raso por medio del área no encontró rematador tras una gran jugada colectiva. El Rayo mantenía su línea de aguantar el balón cuando el contrario se lo permitía y presionar mucho la salida de balón y, gracias a ello, Diego, que estaba dando una clase de cómo interceptar balones, conseguía robar al último hombre de la línea defensiva extremeña. Tras una gran arrancada, el central que persiguió al mediocentro le agarraba y provocaba otro penalti. Los errores defensivos y la buena presión del equipo local estaban condenando al Extremadura, que tras este golpe veía aún más lejos la posible remontada. El penalti sería transformado por segunda vez por el capitán del equipo, completando así su doblete. Posteriormente, el dominio del Rayo iría a más, generando mucho más peligro y que, de no ser por el portero local, el resultado hubiese sido mucho abultado

El técnico del conjunto vallecano decidió efectuar varios cambios para sentenciar el partido y no tardaría mucho en dar resultados. Uno de los cambios, Baladía con el número 11, demostró su capacidad en los uno contra uno, siendo, además, uno de los más destacados de la segunda parte. Este jugador no tardó mucho en marcar para dejar sellado el partido y eso que no llevaba ni 10 minutos en el campo. La jugada comenzó con otra superioridad por banda, que luego Pablo Blázquez daría un pase atrás para Diego que cambió a la otra banda donde se encontraba el capitán del equipo, que solo dentro del área dió un pase a placer a Baladia para cerrar una jugada de libro

El conjunto visitante, sin embargo, ya derrotado, decidió volcarse al ataque y teniendo el cuenta que el Rayo ya encontraba espacios con un Extremadura replegado, iba a pasar grandes apuros hasta el final. El Extremadura tras una gran jugada de toque, que es lo que intentó desde el primer minuto, pero no encontraba huecos en el medio campo del Rayo, puso un centro lateral y consiguió recortar distancias en el marcador a través del delantero centro extremeño. El equipo, aún más volcado, tuvo una falta cerca del área pero que acabó en nada, fue un intento de reacción tardío para el conjunto extremeño

Este partido se resume en los errores defensivos del Extremadura y en el gran trabajo del equipo del Rayo que recupera su mejor versión y le da un empujón de energía para los tres partidos que restan de esta primera fase liguera.