El próximo sábado finaliza la liga en la División de Honor Juvenil
El Rayo Vallecano Juvenil A va a ser el primer equipo de cantera que dé por concluida su temporada liguera. Lo hará el próximo sábado 4 de mayo a las 17:30 horas, recibiendo al CF Fuenlabrada en la Ciudad Deportiva.
Siendo absolutamente sincero, el partido para el Rayo tiene el objetivo de mantener el quinto puesto en la tabla, más que alcanzar el cuarto lugar. Se antoja realmente difícil que el Rayo Majadahonda vaya a pinchar en casa ante el CDI Amistad, penúltimo clasificado. Sin embargo, Getafe CF y Rayo C. Alcobendas están a tan solo un punto de nuestro Juvenil A. Cierto es que tienen dos choques a domicilio duros ante CD Leganés y Real Madrid respectivamente, pero todo puede suceder y para evitar sorpresas, lo mejor es hacer nosotros los deberes y mantener ese quinto puesto. No será una empresa sencilla, puesto que el CF Fuenlabrada se está jugando el descenso de categoría y vendrá con la intención de llevarse los tres puntos y permanecer una temporada más en la máxima categoría del fútbol nacional juvenil. Recordemos lo complicado que nos lo pusieron en la primera vuelta en su casa, empatando a uno en el último suspiro gracias al gol del gran capitán, David Rodríguez.
Hablando de goles, en juego también estará el gran honor de ser el pichichi del equipo esta temporada. A falta de una jornada, encabeza la clasificación Iván Alonso con 6 goles, seguido por David Rodríguez y Revuelto con 5, mientras que Asensio suma 4 dianas. Lo lógico es que el primer Pichichi de cantera 2023/24 salga de esta terna de cuatro futbolistas.
El partido, además, cuenta con el componente emocional de que será el último que muchos de ellos disputen con la camiseta del Rayo Vallecano, ya sea porque decidan salir a otros equipos o, porque el Rayo Vallecano decide no renovarlos de cara a la próxima temporada. Sea como fuerte, desde Matagigantes os queremos expresar nuestra admiración, nuestro cariño y nuestra gratitud por habernos permitido acompañaros en este proceso formativo dentro de este nuestro club. Os vemos visto jodidos, muy jodidos, tanto que nos ha costado sangre, sudor y lágrimas haceros creer en vuestras propias posibilidades. Pero lo lograsteis, nos demostrasteis ser de otra pasta y vuestro trabajo y amor propio os hizo levantaros cuando casi nadie daba un duro por vosotros. Mientras unos hablaban de descenso, otros apostábamos a una racha ganadora. Gracias por no dejarnos con el culo al aire y darnos la razón a esa escasa minoría.
Esta temporada habéis puesto al Rayo Vallecano, de nuevo, en boca de todos en la categoría más bonita del fútbol formativo. Habéis hecho posible lo que parecía imposible, habéis aguantado el pulso durante muchas jornadas al campeón de liga. Habéis conseguido incluso, que en la tele de Florentino se hablen maravillas del rival. Creedme que esto último es casi comparable al mayor de los logros. Habéis conseguido que Miguelito cante (o mueva los labios) y baile al son de «Mi gran noche» de Raphael. Para nosotros queda la celebración de habernos metido en Copa. Sí, para nosotros porque nadie más se intereso por vosotros. El desapego emocional, que habéis padecido y sentido por parte de un club que solo tiene cariño al vil dinero, ha sido digno de estudio. Ante esa situación solo teníais dos opciones: quejaros amargamente de vuestra mala suerte y arrastrar la camiseta por los campos de España o echarle un par de cojones, hacer piña, convertir este equipo en una familia y remar todos en una misma dirección. Como se suele decir: no tenía pruebas, pero tampoco dudas de que la opción elegida por vosotros sería la segunda.
Parece que fue ayer el primer entrenamiento de pretemporada a 40 grados y ya han pasado 9 meses desde entonces.
Y aunque haya pasado tan deprisa, tendremos tiempo de echar la vista atrás y saborear las alegrías que nos ha dejado una temporada de notable muy alto. Pero hasta entonces, vamos a hacer los deberes este sábado y hagamos que Raphael suene bien alto por última vez esta temporada. Por vosotros, por los vuestros, por este escudo, por esta Franja y por nosotros, que no os dejaremos solos en este último baile.
Señores, ha sido un placer enorme veros defender mi Franja, vuestra Franja. Porque estéis dónde estéis el año que viene, un pedazo de este Rayo lo llevaréis por siempre grabado en el corazón.