El Filial de la Franja no aguantó con 10 el chaparrón del Móstoles URJC en la segunda parte y dejó escapar un triunfo que parecía claro con los goles de Juancho (2) y Poblete (4-3).
Lo inimaginable a veces se vuelve cruel realidad. El Rayo B, que ganaba 1-3 en el 80, dejó escapar los puntos en los minutos finales en la cancha de un duro, oficioso y peleón Móstoles URJC (4-3).
El invierno golpeaba las puertas de la periferia sur de Madrid en forma de frío txiri-miri que hizo aun más difícil el jugar en el irregular y clásico césped natural de El Soto. La igualdad imperante en el comienzo fue rota en el minuto 12 por Juancho, quien ya había dispuesto de un par de remates, y abrió la lata tras robar el balón cerca de la medular, acercarse al área y, sin entrar, sacarse un chutazo ajustado al poste. Apenas 3 minutos después, en un córner puesto por Clavería desde el costado derecho, llegó desde la frontal Poblete para saltar y rematar con todo, poniendo el 0-2 en el electrónico. Con la ventaja, parecía que el partido se inclinaba hacia el lado franjirrojo, y más cuando los mostoleños tuvieron que hacer 2 cambios antes del minuto 30 por las lesiones de Samu y Lozano. Sin embargo, la palabra «rendición» no está en el vocabulario de los locales, que recortaron distancias en el minuto 38 en una falta que Álvaro Corral remató con la coronilla en el pico del área chica, colándose justo por la escuadra contraria. La posibilidad de que se viera un encuentro nuevo parecía borrarse al filo del descanso, en un balón que le hicieron llegar a Juancho en la frontal, con todo a favor para driblar al meta Aitor y anotar a placer, pero que no necesitó tanto debido al resbalón del portero, que le dejó el campo libre para poner el 1-3 y completar una primera parte más que decente de los de Juanvi Peinado. Tras los primeros 45 minutos, nadie, ni siquiera de entre las personalidades futbolísticas del palco de El Soto, hubiera apostado a que el Rayo B no se llevaba los puntos a Vallecas.
La placidez con la que el Filial de la Franja se desenvolvía en la fría mañana mostoleña se quebró antes de sumarse 15 minutos en la segunda parte, cuando el colegiado, que tuvo una muy desafortunada actuación, castigó con tarjeta amarilla una entrada de Kike, quien vio una discutible tarjeta con anterioridad en el primer periodo y vio así el camino de vestuarios con más de media hora por jugarse. El ver que su rival se quedaba con 10 jugadores espoleó al Móstoles URJC, que comenzó un asedio al área rayista que bien podrían haber firmado los directores de ‘Juego de Tronos’, buscando el hueco en la defensa visitante, y si no se encontraba, la cabeza de Berodia que tantas garantías da siempre. El empeño de la defensa del Rayo B, reforzada con el ingreso de Nico Cañizres y Raúl Espinosa en lugar de Villacañas y Juancho, y varias grandísimas intervenciones de Iván Oviedo mantuvieron el marcador inmóvil durante un tiempo largo.
Al minuto 80 parecía que el cuadro vallecano se saldría con la suya, con el cansancio empezando a pesar en los ataques locales y teniendo alguna oportunidad esporádica a la contra, pero el destino tenía otros planes. En el minuto 84, un balón largo se escurrió hasta llegar a la frontal del área pequeña rayista, donde Ónega fusiló sin piedad el marco visitante. A partir de ahí, fue como si el Rayo B hubiese sido borrado del mapa. Cuando se cumplía el 90 Barri hacía el empate rematando un córner, y ya pasados 2 minutos de los 4 añadidos, la hecatombe rayista se confirmó en un centro que la defensa no acierta a despejar y que dejó el balón muerto en el punto de penalti para que Nacho Gil desatase el delirio en la hinchada local y la incredulidad en el lado visitante. La tardía remontada azul dejó en cuadro al Filial de la Franja, y cuando sonó el silbato final la tensión acabó por hacer que aquello estallase, con broncas entre jugadores y banquillos de ambos equipos, recriminaciones al árbitro y un conato de tangana en el vestuario que pudo acabar muy mal.
En lo futbolístico, el Rayo B dejó escapar en los minutos finales una victoria que parecía tan clara como importante era. Una catástrofe que en condiciones normales no pasa ni por asomo. Un partido que pintaba muy correcto pero acabó siendo para olvidar.
FICHA TÉCNICA
CD Móstoles URJC: Aitor (p.), Sardi, Samu (Barri m.6), Álvaro Corral, Diego, David Rodríguez, Nacho Gil, Ivo, Berodia (cap.), Lozano (Ónega m.30) y Bravo (Borja Acha m.66).
No utilizados: Fran (p.s.) y Rubén. Entrenador: Iván Ruiz.
Rayo Vallecano B: Iván Oviedo (p.), Del Valle, Akieme, Poblete, Moha, Clavería (cap.), Iván Bueno, Kike, Ontiveros (Rivero m.87), Villacañas (Nico Cañizares m.60) y Juancho (Raúl Espinosa m.66).
No utilizados: Alberto «Chino» (p.s.) y Rubén Bas. Entrenador: Juanvi Peinado.
Árbitro: Sr. Puerta Sánchez. Expulsó por doble amonestación a Kike, del Rayo B. Amoenstó a Álvaro Corral, Ónega, Diego, Ivo y Bravo en el Móstoles URJC y a Iván Oviedo y Ontiveros en el Rayo B, así como al preparador físico del Rayo B Sergio Martos.
Goles: 0-1, m.12, Juancho. 0-2, m.15, Poblete. 1-2, m.38, Álvaro Corral. 1-3, m.44, Juancho. 2-3, m.84, Ónega. 3-3, m.90, Barri. 4-3, m.90+2, Nacho Gil.
Estadio Municipal El Soto, unos 200 espectadores. Partido correspondiente a la 13ª jornada del Campeonato Nacional de Liga, Tercera División, grupo VII. Mañana fría y lluviosa. Césped natural en condiciones mejorables y difíciles para la práctica del fútbol.
Informó Jorge Morales García. Imagen de Miguel Ángel Mena.