Mario Otero: «Hay chicos que son del Rayo Vallecano, que sienten el Rayo Vallecano»

Mario Otero: «Hay chicos que son del Rayo Vallecano, que sienten el Rayo Vallecano»

Entrevista con Mario Otero, entrenador del Juvenil A del Rayo Vallecano en la antesala del debut liguero de su equipo

Después de una pretemporada más corta de lo habitual, pero de muchísimo trabajo, mañana se da el pistoletazo de salida a la liga 2022/23 en el grupo 5 de División de Honor Juvenil.

El Rayo Vallecano inicia el campeonato liguero en casa ante el CF Fuenlabrada a partir de las 18.00 horas del sábado. Como previa de partido no se nos ocurría nada mejor que mantener una charla con el míster franjirrojo, Mario Otero. En ella nos habla de cómo ha sido su llegada a Vallecas, la adaptación de los chicos nuevos y como ve a un equipo con muchas caras nuevas.

El míster nos repite la importancia del crecimiento individual de los futbolistas, lo que conllevará también un beneficio para la mejora a nivel colectivo del grupo.

Os dejamos la entrevista con Mario Otero.

Pregunta: Arranca esta semana la liga. ¿Cómo llega el equipo al inicio de la competición?

Respuesta: Ha sido una pretemporada bastante corta de tan solo cuatro semanas. Como bien habéis visto, hemos reestructurado bastante la plantilla, ha habido bastantes incorporaciones y eso lleva un tiempo el ensamblar todas las piezas. Ha habido chicos que se han ido incorporando en las últimas semanas e incluso días, como es el caso de Ninte. El equipo llega muy bien preparado y con muy buenas sensaciones, la verdad es que hemos tenido una pretemporada positiva. Estamos con muchas ganas, desde la semana pasada e incluso desde la vuelta del Torneo de Tenerife estamos con ganas de cara al inicio de liga.

Ha sido una pretemporada corta pero ha sido mucha doble sesión, porque al haber sido pocos días hemos tenido que meter bastante doble sesión. En muy poco espacio de tiempo hemos hecho muchas sesiones de entrenamiento (el miércoles fue la sesión número 22). En cuatro semanas y media hemos descansado muy pocos días, pero lo encaramos bien y con muchas ganas y mucha ilusión de hacer una buena temporada y los chicos evolucionar y seguir creciendo  a nivel individual. Por supuesto que esa mejora a nivel individual se vea reflejada a nivel colectivo.

P: ¿Cómo ha sido la pretemporada?

R: Como he dicho anteriormente, la considero corta. Yo estoy acostumbrado a hacer cinco semanas de pretemporada, pero también es cierto que el año pasado las competiciones fueron más largas y se acabó muy tarde. Entendemos desde el cuerpo técnico que se debía empezar cuando hemos empezado para dar al equipo el descanso adecuado. La pretemporada ha sido con sensaciones muy positivas, yendo de menos a más en cuanto a resultados que es lo menos importante en pretemporada, pero sobre todo en sensaciones. Yo creo que poco a poco hemos ido viendo reflejado el trabajo que hemos ido introduciendo en los entrenamientos. A nivel de resultados los últimos partidos han sido muy positivos y además jugando bastante bien. También es verdad que hemos alternado momentos muy buenos y momentos que nos costaba más. Creo que es algo normal en pretemporada y ahora lo que queremos confirmar durante la temporada son los buenos resultados y las buenas sensaciones que hemos tenido en esta pretemporada.

P: ¿Damos por cerrada la plantilla ya?

R: En principio sí, porque tenemos cubiertas las 22 fichas que la Federación permite para inscribir jugadores.

P: ¿Tienes el equipo que querías o alguna posición se queda algo corta?

R: He de decir que sí, que tenemos la plantilla que imaginábamos cuando se hizo oficial nuestra llegada al Juvenil A del Rayo Vallecano. Sabíamos que cuando llegáramos y estudiásemos en profundidad lo que teníamos en la plantilla, tendríamos claras las necesidades para poder mejorar y creo que las hemos cubierto. Además, las hemos cubierto con los nombres que queríamos. Tengo que agradecer personalmente el trabajo que ha hecho Juan Pedro, porque cada vez es más complicado en edad juvenil firmar jugadores, porque lo que cada vez tienen más herramientas para convencer y fichar jugadores. Es muy complicado sacar a los jugadores de sus clubes de origen. Desde la dirección deportiva se ha hecho un trabajo excelente, porque han sido 24 horas al día de llamadas, de reuniones, etc. Y sólo los que estamos dentro sabemos lo complicado que es y hemos reestructurado la plantilla al 60%, algo que es muy complejo, y hemos logrado hacer una plantilla muy competitiva. Por lo menos hemos conseguido tener la plantilla que yo quería, muy compensada con dos jugadores por puesto y jugadores de un gran nivel que van a estar a la altura de la camiseta que defienden.

P: El equipo es prácticamente nuevo, ¿Eso es un hándicap a la hora de trabajar?

R: Puede llegar a ser un hándicap pero también es algo positivo, según qué momento. Porque al final entiendo que en muchos casos hay jugadores que por la cultura de la inmediatez, ahora en la sociedad estamos acostumbrados a la inmediatez y creo que nos cansamos en mucha medida de lo que llevamos tiempo viendo. Yo creo que tener jugadores nuevos en el club también es positivo porque ese componente motivacional es bastante alto, ya que los chicos vienen a un club de Primera División que es bonito de estar y tan llamativo como es el Rayo Vallecano. Entonces, yo creo, que los jugadores de fuera siempre vienen con un plus de motivación de jugar aquí en el Rayo Vallecano. En ese sentido es algo muy positivo tener una plantilla muy nueva, pero sí es cierto que, como he dicho anteriormente, el ensamblar todas las piezas nuevas llevas su tiempo. Nosotros ahora que tenemos una buena base de jugadores del Juvenil B del año pasado, también alguno de Juvenil A, tenemos a Samu Becerra que viene de Cadete A, hace que sea una buena base de jugadores del Rayo Vallecano. Yo estoy encantado con ellos porque son chicos que son del Rayo Vallecano, que sienten el Rayo Vallecano. Yo he percibido, y eso habla muy bien de la plantilla y de la madurez de los chicos, que a los jugadores que han venido de fuera les han hecho entender lo que es el Rayo Vallecano e incluso a nosotros también como cuerpo técnico, ayudándonos bastante. Este equipo tienen muchos líderes dentro de la plantilla, que también es algo muy positivo y algo que destaco. Y sobre todo si algo me gusta de mis jugadores es que son del Rayo Vallecano, que sienten lo que hacen, que sufren con cada derrota del equipo y que disfrutan con cada victoria del equipo, porque son ADN Rayo Vallecano y eso también ayuda mucho a la adaptación de los que que hemos llegado nuevos, entre los que me incluyo yo.

P: ¿Qué tal ha sido tu llegada a Vallecas? ¿Te lo esperabas todo así?

R: Ha sido excelente y me he sentido muy cómodo desde el primer día. Al final, para mí ha sido muy fácil la adaptación puesto que conocía a la plantilla de haberles visto jugar. Aunque no he tenido nunca trato directo con ellos, sí que a través de referencias y he visto bastantes partidos del año pasado del equipo en vídeo o algún partido me vi también en directo durante la temporada. Es una generación de jugadores que he seguido prácticamente desde su etapa de cadetes tanto a los chicos que siguen estando en el club como los que han salido (José Luis, Fabián Luzzi). Conozco muy bien la generación, por lo que tener información in situ del equipo ya es positivo de cara a la adaptación. Y en el club sensacional. Yo coincidí con Juan Pedro en mi etapa en Fuenlabrada, entonces ya sabe cómo trabajo y yo sé perfectamente cómo trabaja Juan Pedro. Tambien conozco muy bien al Rayo Vallecano, porque al final es un club al que me he enfrentado mucho en los últimos años. Conozco perfectamente la idiosincrasia de la cantera del Rayo Vallecano, el perfil de jugador que gusta en la casa, por lo que no me pillaba nada absolutamente de imprevisto. En ese sentido ha sido todo muy sencillo, teniendo que agradecer también a entrenadores de la cantera con los que ya tenía amistad antes del llegar al Rayo Vallecano, recibiéndome con los brazos abiertos. Iván Amaya al que considero un buen amigo, ya teníamos muy buena relación antes de mi llegada, Toni Paredes, que es un gran amigo, Jorge Rubio, con Ramón Torres también he tenido contacto en mi llegada al club. La propia gente del club me ha puesto bastante fácil la adaptación. Estoy muy contento con todos los medios de los que disponemos, creo que tenemos una ciudad deportiva que es la leche. Todo han sido facilidades por parte de la gente que trabaja en la casa, José María que va a estar de delegado con nosotros que es una persona de club, José Luis que es el responsable de la instalación también nos ha ayudado desde el primer día, es decir, todo el mundo nos ha ayudado mucho.

P: ¿Qué Rayo quieres que veamos?

R: Es un Rayo que guste a la gente. En los clubes en los que he estado intento siempre estudiar un poco la historia del club, me gusta ver también cómo juega el primer equipo porque somos el Juvenil A y somos el tercer equipo del club. Estamos a dos pasitos a esa llegada de los chicos al primer equipo, entonces creo que nuestro juego tiene que ser similar a lo que practica el primer equipo. Cuando llegué al Rayo me vi bastantes partidos del año pasado del primer equipo y entre eso y lo que conozco de Iván Amaya que va a ser el entrenador del filial, lo que conozco del prototipo de jugador que suele gustar en la cantera del Rayo Vallecano, a partir de ahí hemos diseñado un modelo de juego. Obviamente, también estudiando las características de los jugadores que vamos a tener, hemos diseñado un modelo de juego. El Rayo Vallecano que quiero ver y el Rayo Vallecano que vamos a ser es un Rayo Vallecano valiente, un Rayo con una propuesta atractiva, muy dinámico, que intente siempre buscar portería rival, un equipo que sea muy agresivo cuando pierda el balón para intentar recuperarlo lo antes posible y un Rayo Vallecano que haga disfrutar a la gente. Lo hablo mucho con los chicos, que tenemos que tener ese sentido de pertenencia con el club y tenemos que transmitir a la grada, que disfrute y vibre con cada partido del equipo. Es el Rayo Vallecano que quiero ver y es el que vamos a ver, porque es para lo que estamos trabajando en todos los entrenamientos y los chicos lo tienen muy claro, han cogido de muy buen grado la idea que tenemos y lo están haciendo sensacional.

P: ¿Cuál es el objetivo del equipo?

R: Mi objetivo principal como entrenador del Rayo Vallecano es que la mayoría de los jugadores puedan seguir el año que viene en el filial o incluso alguno en el primer equipo y que, por supuesto, tengan una evolución dentro del club. Por ejemplo, este año hacemos una temporada en División de Honor de la leche y quedamos tercer o segundo clasificado, pero de aquí no sacamos jugadores el año que viene para el filial y no hay jugadores que el día de mañana vayan a estar en el primer equipo para mí no tiene sentido. Prefiero quedar séptimo y sacar 7, 8 o 9 jugadores del año que viene para filial a quedar segundo y sacar solo uno, lo tengo claro. Para mí el objetivo prioritario es ese, el que los chicos evolucionen a nivel individual para que puedan ser futbolistas, para que puedan llegar a fútbol profesional en nuestro club. Luego, esa mejora individual va a hacer que el equipo a nivel colectivo funcione, obviamente. Es una de la cosas que estamos insistiendo a los chicos, es el Rayo Vallecano y tenemos la obligación de intentar salir a ganar todos los partidos. Eso a nivel mental tiene un desgaste importante, pero estos chicos ya tienen 18 y 19 años y ya tienen que saber jugar con esa presión, con ese componente emocional de tener que tratar de ganar todos los partidos. Porque al final el escudo que tenemos nos obliga a ello. Tratar con naturalidad dentro de esa idea que va a haber partidos que ganemos, otros que empatemos y otros que perdamos, pero la idea es que tenemos que ganar cada partido. Objetivo a largo plazo no me marco más allá de lo que comento y objetivo a corto plazo tratar de ganar todos los partidos posibles, obviamente.

P: ¿Cómo es Mario Otero como entrenador?

R: Yo creo que eso te lo debería responder la gente que trata conmigo. Yo al final te voy a contestar un poco por referencias, que yo sé que la gente tiene de mí. Me gusta tener feedback con la gente que trabaja conmigo y con jugadores que han trabajado conmigo. Me considero un entrenador honesto, es decir, una de las cosas que me caracteriza  y que intento que me caracterice desde el día uno desde que empecé a entrenar las 12 temporadas que llevo entrenando, es ser honesto con mi grupo de trabajo, ser honesto con mis jugadores. No intento nunca engañar ni dar falsas esperanzas a mis jugadores, evidentemente en cualquier equipo hay titulares y jugadores que juegan más y jugadores que juegan menos, y al jugador hay que ser honesto y al jugador que esté jugando menos no me gusta engañarle y sí explicarle los puntos de mejora para intentar jugar más minutos. Soy un entrenador muy exigente, considero que vivo por y para esto y soy entrenador las 24 horas del día,  no soy un entrenador que haga entrenamiento y me vaya a mi casa y deje de pensar en fútbol. Le echo muchas horas, entonces exijo mucho a mis jugadores. Me gusta ser muy metódico, llegar mucho al detalle. En el mundo del fútbol el llegar al detalle es lo que marca la diferencia en muchos partidos, sobre todo ahora con la igualdad que hay en el mundo del fútbol. Soy un entrenador muy ambicioso, tengo 30 años y tengo ambición de ser entrenador profesional, poquito a poco ir marcando pasos para intentar cumplir mi objetivo como entrenador. Siempre con calma y teniendo claro que todavía tengo muchas cosas que aprender, pero también tengo muchas cosas que aportar a mis jugadores e intentaré aportar mi granito de arena también al club.

P: Por último, el calendario ha sido caprichoso y comenzamos contra el Fuenlabrada, ¿Hubieses preferido otro rival para empezar?

R: Yo a Fuenlabrada le tengo un cariño especial obviamente, estuve allí dos temporadas. Conseguimos ascender a División de Honor que era un objetivo prioritario para el club. De hecho, tanto Juan Pedro como Miguel Melgar que junto a Carlos Manzano fueron las personas responsables de mi llegada a Fuenlabrada, me hicieron entender desde el primer día que el objetivo prioritario del club era meter al Juvenil A en División de Honor, porque el primer equipo en ese momento estaba en Segunda División y había crecido de manera exponencial. Pero era verdad que la cantera no estaba acompañando hasta ese momento. Se me firmó porque en el Atlético de Pinto anteriormente lo había conseguido en una situación muy similar a Fuenlabrada, porque ambos clubes nunca habían subido a División de Honor y, bueno, pues lo conseguimos en Fuenlabrada. Lo conseguimos en un año muy complicado además de pandemia, además conseguimos que dos chicos estuvieran y estén actualmente en el fútbol profesional en el primer equipo, como son David Amigo y Damián, jugadores que ya han marcado goles con el primer equipo.  Entonces yo tengo mucho cariño a Fuenlabrada, el año pasado en División de Honor hicimos un inicio de temporada buenísimo llegando a estar incluso entre los cinco primeros en las ocho primeras jornadas. No perdimos ningún partido ni el año en el Nacional ni en División de Honor hasta el último partido de la ida como locales, es decir, creo que hemos hecho un buen trabajo allí. Del Juvenil A del año pasado hay 7, 8 jugadores que van a estar en el filial y alguno está ya directamente incluso en primer equipo como Aarón, que el otro día estaba convocado. Entonces, evidentemente le tengo un cariño especial a Fuenlabrada, porque conmigo se han portado muy bien. Es verdad que el año pasado al final no terminamos la temporada allí porque enganchamos una racha de resultados bastante negativa, fruto de que la situación del primer equipo no ayudaba y estuvimos prácticamente desde el mes de enero entrenando con 10, 11 jugadores por las bajas que había en el primer equipo que tenía que tirar mucho del Juvenil A y del filial. Esto repercutió bastante en el rendimiento del equipo y enlazamos una racha negativa y no acabamos la temporada. El equipo al final consiguió salvarse gracias a Dios, solo estuvimos en descenso una jornada en toda la temporada, entonces yo creo que fue justo que se salvara. Bueno para mí evidentemente el jugar contra el Fuenlabrada no es que sea especial, sino que es un equipo al cual le tengo aprecio y le deseo toda la suerte del mundo durante la temporada y espero que consigan el objetivo que se hayan propuesto. Preferir o no preferir me es igual, así que al final tenemos que jugar contra contra todos y tenemos claro cuál es el objetivo del sábado que es ganar el partido. Vamos a salir con intención de ganar el partido desde el principio. Ya digo, mucho respeto y mucho cariño por el Fuenlabrada, de hecho vamos a enfrentarnos a varios chicos que han trabajado conmigo en momentos puntuales que subían a entrenar -Adrián Sierra, Pacheco-. Muchos chicos que  han estado en dinámica con nosotros el año pasado y les tengo cariño y bueno, pues, espero que el Fuenlabrada tenga toda la suerte del mundo excepto el sábado obviamente, queespero que saquemos los tres puntos y vamos a trabajar para ello.