Con goles de Ilies, Manu Navarro, Jaime y Joselu, el Rayo B remontó y venció al ED Moratalaz (4-1) en un partido en el que pasó de todo.
Ocasiones claras, ritmo alto, buenas intervenciones de los porteros, faltas, polémica, goles… Tuvo de todo y más el partido entre Rayo B y ED Moratalaz, que se saldó con triunfo de los de Ángel Dongil pese a empezar por debajo en el marcador.
Noche cerrada y fría a las 20:00 de un miércoles, el marco que acompañaba el encuentro de la jornada intersemanal en la «City». Después de bastante tiempo sin competir en casa, y tan solo 3 días después de vencer en Villaviciosa de Odón, tenía el Filial de la Franja un envite complicado ante el cuadro que dirige Jorge Vallejo, que llegaba a Vallecas herido tras dos derrotas consecutivas y sumido en los puestos de descenso. Para tratar de superar a un rival duro y alejarse más de la zona roja. Dongil dispuso un once en el que se agregaba Jaime a la defensa, Manu Navarro y Arratia dirigían el medio campo e Ilies se quedaba como referencia arriba, dando descanso a Joselu Pérez, que saldría desde el banquillo. Estaban también las últimas incorporaciones: el meta Pantoja, que debutó en Villaviciosa, volvía a ocupar los palos, mientras que el defensor Gerard, procedente del Barça, esperaba su oportunidad en el banco.
Ya desde el comienzo el ritmo del partido fue frenético, con ambos equipos buscándose las cosquillas a tumba abierta y el balón yendo de un lado a otro casi como en un partido de tenis. El mínimo error podría resultar fatal, y casi le pasó eso al Moratalaz. Un mal pase atrás en la frontal propició el robo de un Vere que completaría un gran encuentro. El carrilero rayista penetró en el área y encaró al meta Elías. Puso el pase de la muerte en el corazón de la pequeña para la llegada de Ilies, que entraba con todo a favor y con mucha energía. Tal vez demasiada, pues su remate, inexplicablemente, se estrelló contra el larguero. En el minuto 5 el Rayo B perdonó, y en el 12 lo pagó. Una internada por el costado derecho sirvió para poner el centro raso a la frontal. Adnan remató con violencia ante la muralla defensiva. El tiro fue desviado por su compañero Rubén Ayuso, cambiando la trayectoria de la bola y haciendo imposible la intervención de Pantoja. Festejaba la parroquia visitante, tal vez de forma demasiado vehemente en la grada, pues varias veces tuvo que acercarse el empleado de seguridad de la «City» a poner orden. En el campo, caía el 0-1 como un jarro de agua fría para el cuadro vallecano.
Pese al tanto en contra, el Rayo B no perdió ni un ápice de su ritmo y fue a buscar el empate con energía. El Moratalaz, sin replegarse mucho, supo mantener a su rival lejos del área y forzarle a disparar desde la frontal. Probaron suerte en varios momentos Diego Lorenzo (cuyo partido alabó Dongil ante las cámaras), Aguirre y Vere, y en todos sus tiros, rasos y entre palos, se encontraron con las manos de Elías, que blocaron todos sus tiros. También hubo momentos de peligro en el otro área, aunque Pantoja se mostraba seguro en algún tiro que intentaba la delantera de negro y oro, especialmente el ex rayista Rubén Ramiro. Sería en el área local donde tendría el primer episodio desafortunado del arbitraje de Álvarez Castaño, que en ocasiones no parecía enterarse de lo que sucedía. Un balón puesto al área que buscaba rematar Adnan lo sacó Íker Recio con la mano, algo que parecía claro para todo el mundo menos para el que tenía que verlo. Este error arbitral cayó en favor del Rayo B, pero luego se lo cobraría con creces en el segundo tiempo. Al descanso caía el Filial de la Franja sin ser inferior, pero sin el acierto que sí logró su rival.
En el descanso, la plantilla franjirroja se conjuró, los pilares del vestuario tomaron la palabra para decir que iban por el buen camino pese al marcador, y así salieron al segundo tiempo con energía renovada en busca de dar la vuelta al partido. Y lo lograron bien pronto. Apenas cumplidos 5 minutos de la reanudación, una cabalgada por la izquierda de Vere permitió servir el balón a Ilies en el pico de la pequeña. Esta vez el 19 del Rayo B no perdonaría y colocaba el empate con una soberbia definición. Segundo partido seguido viendo puerta y dedicatoria especial del tanto de Ilies. Cuando aun un servidor estaba anotando y tuiteando en el perfil de Matagigantes el 1-1, apenas levantó la vista y veo a Manu Navarro entrando al área por el flanco derecho, driblar a Elías por fuera y en la línea de fondo, casi sin ángulo, mandarla al fondo de la red para desatar la locura en la «City». En apenas un minuto se pasó del 0-1 al 2-1. El Filial de la Franja, a base de mantener la fe en su juego, lograba poner patas arriba el encuentro y abrir el camino del triunfo.
Obviamente, el encajar 2 goles en un minuto, como pasase en la ida pero a la inversa, hizo reaccionar al Moratalaz, que puso una marcha más con la pelota en los pies. Sin embargo, la defensa del Rayo B, que en el primer tiempo había estado errática en momentos puntuales, se veía esta vez segura y contundente. Además, la contundencia con la que llegaban los visitantes al área de Pantoja se iba diluyendo según avanzaban los minutos, amén que aumentaba su impotencia y desesperación. El Rayo B había olido la sangre tras ponerse por delante y pasar a un modo de juego más vertical, pero no por ello menos ofensivo. Entrarían de refresco Joselu por Ilies arriba y el debutante Gerard por el amonestado Boigues atrás. Sin pasar dos minutos de la doble incorporación, dispuso el cuadro local de un córner por la derecha que puso Aguirre con precisión quirúrgica al área chica y a media altura. Ahí metió la coronilla Jaime para hacer que el balón superase por arriba a Elías, describiendo una preciosa parábola que acabaría en el fondo de las mallas. La cohesión y unidad de un vestuario forjado en una temporada difícil se vio en el festejo del 3-1, en como todos los que estaban en el campo, incluido Pantoja, fueron a abrazar al joven central para felicitarle por su tanto, el primero que marca en Tercera.
Este gol encajado en el 64 terminó per desarbolar al Moratalaz, que a partir de ahí no pudo sino poner al rojo vivo un partido ya caliente por el ritmo frenético al que se jugaba. Así pasó que Aguirre, que ya empezaba a sentir las piernas cargadas, fue víctima de una dura entrada de Aníbal, quien le impactó de lleno con los tacos en la espinilla. Una acción que estamos viendo sancionarse con tarjeta roja. Aquí Álvarez Castaño empezaría a cobrarse el penalti que le perdonó al Rayo B en el primer periodo, dejando el trance solo en amarilla para el 15 visitante, y aun su equipo se quejaba, agitando los ánimos de los exaltados de la grada que citábamos anteriormente y que no sabemos si son público en general o acreditados de la delegación visitante. Sea como sea, no es la primera vez que pasa esto en la «City». En cualquier caso, Aníbal jugó unos minutos gratis, lo que tardó en cambiarle Jorge Vallejo al ver la posibilidad de una segunda amarilla. Antes, y como fruto de aquella entrada, Aguirre abandonaría el campo cojeando, teniendo que entrar en su lugar Héctor en el 68.
Decíamos que empezó a cobrarse el árbitro la pena máxima que dejó sin pitar, pues todavía habría otra acción de polémica. Gerard agarraba a Ortega para evitar que salga a la contra, falta y amarilla para el 17 rayista. Hasta ahí todo bien. Pero al instante de pitarse la falta, Ortega lanzó un puñetazo contra Gerard sin llegar a impactarle, fruto de la desesperación. Este gesto quedó totalmente impune. Eventualmente el 30 visitante sería amonestado por un placaje digno de rugby, cuando se fue al suelo y se llevó consigo a Joselu, algo menor considerando que por poco incurrió antes en agresión. Mientras de un lado se caldeaban los ánimos, del otro se trataban de poner paños fríos y de cerrar el encuentro. Y así lo logró entrando en los últimos 10 minutos, en un saque en largo de Pantoja que bajó Joselu en zona de tres cuartos para abrir a Vere, quien se la devolvería al joven ariete para que, en el corazón del área, definiese por arriba e hiciese lo que mejor hace el 27, marcar goles. Ya sea de titular o de suplente, Joselu parece tener una cita con el gol cada vez que juega, y esta no iba a ser menos. Segundo partido seguido viendo puerta, igual que Ilies, y tanto para cerrar un partido muy completo del Filial de la Franja.
Ya con el 4-1 y con el pescado vendido, entraría Rubén De Tomás por Diego Lorenzo para tener piernas frescas arriba. Aquí ya sí, el Moratalaz entregó las armas tras un leve arreón para hacer el gol de la honra que nunca llegaría. La tensión seguía del lado visitante con el colegiado, que en una de estas mostró dos amarillas por protestar al banquillo, una de ellas a Rubén Ramiro, quien llevaba sustituido desde el minuto 56. Para no alargar más el trámite, hubo 2 minutos de descuento que pasaron como un pacto de no agresión. Al pitido final, imágenes de deportividad en el césped y de alegría por parte local.
Importante triunfo del Filial de la Franja ante un rival directo, aun siendo por motivos no deseados por ninguno de los dos equipos. Salía el Moratalaz de Vallecas encajando su 3ª derrota consecutiva, algo que no había pasado desde su ascenso a Tercera. Por parte del Rayo B, 2 de 2 en 2022, 4º partido seguido sin perder y comienzo inmejorable de la maratón de partidos que se viene. Los de Dongil afianzan la 10ª posición alcanzando los 30 puntos, quedando el playoff a 6 (con un partido menos que el 5º, el Getafe B) y el descenso 3 por debajo (con 3 partidos menos que el Parla, 15º y primero de los que están en puestos de descenso seguro). Casi sin tiempo para saborear este triunfo, este domingo llegará otro difícil desafío, pues tocará visitar en el Recinto Ferial de Alcalá de Henares al Complutense, otro equipo que necesita puntos como el comer.
Informó Jorge Morales García. Imagen de José Magán.