Tras la eliminación de Copa, las guerreras vuelven a la Liga recibiendo al Dépor, el domingo a las 18.30.
El fútbol es ese deporte con más de cien años de antigüedad que nos hace disfrutar de esta locura irracional a unos cuentos locos cada fin de semana (para los más enfermos ya se han encargado las diferentes federaciones de poner partidos casi a diario).
Es ese deporte en el que, como dirían muchos “entendidos”, 20 personas intentan meter una pelota entre tres palos y dos se dedican a pararla. Siendo así, que alguien me explique por qué cada semana, durante 90, 180 o 270 minutos, muchos no somos capaces de pensar de forma racional, sólo porque una pelota está rodando por el campo. Y si encima, de esos 22, hay once que llevan la elástica de tu equipo, olvídate de ser persona, y mucha suerte a quien intente hacernos razonar. Las sensaciones post-partido ya depende de qué haya pasado y de cómo haya jugado el equipo, porque hay formas y formas, tanto de ganar como de perder.
Muchos piensan que lo importante es que se sume de 3, da igual la manera. Otros, quizá los pocos enamorados que quedamos de este deporte, preferimos que nuestro equipo se deje la vida en el verde, que compita y sea valiente y, si tenemos la suerte un poco a nuestro favor, podamos llevarnos una alegría. Todo eso se amplifica cuando se es de un equipo como el Rayo, y aumenta de forma exponencial en la sección femenina. No podemos ser resultadistas, por mucho que sea Primera División. Sí, hay que sacar puntos para no bajar, pero lo que nos hincha el pecho de orgullo a quienes vemos todo eso desde fuera es que nuestras chicas se diviertan. Que Paula Fernández haga magia con una pelota, que Pilar se cambie el 4 por el 10 y lance algún que otro sombrerito, o que nuestra 14 tire una porra en el córner contrario porque ha podido subir la banda. Nos gusta disfrutar y verlas disfrutar a ellas. Nos gustan valientes, atrevidas y sin miedo al rival, sea quien sea.
Esta semana nos visita el Dépor de Manu Sánchez, uno de los equipos más atractivos de ver en esta competición. Un equipo vertical, que le gusta tener y divertir(se) con el esférico, y con auténtica artillería arriba, lo que le ha valido para ser el quinto mejor equipo de Primera, empatado a puntos con el Athletic. Todo un mérito para un recién ascendido. Tras endosarle 7 goles al Valencia en Riazor, llegan cargaditas de moral y con la puntería afinada. Con las bajas de Alba Merino y Laura y la presencia de las canteranas Patri López y Carlota, esperamos que lleguen con todo a Vallekas el domingo.
De forma completamente opuesta llegan nuestras guerreras, que tras caer en Copa de la Reina frente al Tacón acumulan 4 partidos seguidos perdiendo. Son octavas en Liga, pero sólo a 6 puntos de su rival de este fin de semana. En cuanto al capítulo de bajas, recuperamos a Sheila pero no así a Eva Alonso. En la convocatoria de Santiso destaca la presencia de Mónica y Adri, ambas jugadoras del filial y con opciones a tener minutos en el partido.
Aún con todo en contra, estamos seguros de que se reinventarán, una vez más, para sorprendernos. Además, con el equipo masculino jugando en Tenerife, es un buen día para que se llenen esas nuevas gradas de la City. Poco más que añadir, sólo queda esperar a que los nervios vayan creciendo para terminar dando paso, el domingo a las 18:30, a esos 90 minutos de locura irracional…