El gol de la afición

27/02/2018
El gol de la afición

Lo del famoso jugador número 12 en ocasiones es una leyenda urbana, pero en Vallecas sabemos muy bien que la afición a veces es capaz de hacer posible lo imposible. El sábado pasado volvió a suceder.

El Rayo ganaba 1-0 gracias al gol de Emiliano Velázquez en el minuto 12, cuando un minuto después se produjo un hecho sobrenatural, el gol de un jugador que no estaba en el césped, a pesar de ser el mejor jugador del Rayo Vallecano,  hablo de su afición.

La jugada de Álex Moreno en la banda izquierda servía de preludio para el gol de Adrián Embarba, que ponía el 2 a 0 en el marcador,  pero el que estuviera en el campo se dio cuenta de que el gol lo había marcado la afición rayista.

El gol fue inesperado para el aficionado que estaba eufórico y aún seguía celebrando el primer tanto cuando tan solo un minuto después, una nueva alegría inundaba al animoso Estadio de Vallecas, el emocionado rayista sabía que ese gol llevaba su nombre.

Tras la presión que el conglomerado formado por los seguidores franjirrojos ejerció  tras el primer gol, el equipo suguió luchando, atacando, la gente agradecía el juego desplegado por el conjunto que dirige Míchel: aplausos de pie, palmas a ritmo, cánticos…

La historia del máximo o máxima goleador o goleadora de la historia del Rayo Vallecano, la afición, nos ha permitido jugar en Europa, superar deudas, aliviar los descensos, y seguir peleando.

Mucho hemos tenido que sufrir, y la visita del líder a Vallecas no nos empequeñeció, no eran 11 jugadores, éramos  más de 300.000 vallecanos y vallecanas los que jugamos y vencimos, y es que queremos el ascenso, pero sin olvidar de dónde venimos. Hemos pasado malos ratos por el juego del equipo, fríos por un clima que aún se congelaba más por la situación deportiva, crisis institucionales que han dejado mella, etc. Pero cualquier aficionado o aficionada rayista sabe sobreponerse a estas circunstancias y mirar más allá, porque hemos navegado mucho tiempo en una tormenta y ahora que por fin vemos tierra, queremos atracar en las primeras posiciones, coger el botín de los puntos necesarios,  habitar y poblar esa isla que se llama “Primera”, porque hemos pasado por Segunda B, Segunda, Primera… Y siempre un jugador o jugadora ha permanecido fiel, no está por dinero, ni por reconocimiento, está por amor, amor que nos hace grandes.

Texto: Daniel Chaves Velázquez.

Imagen: Iván Díaz