«Verde que te quiero verde. Verde viento. Verdes ramas. El barco sobre la mar y el caballo en la montaña. Con la sombra en la cintura», el Racing de Santander, próximo rival del Rayo Vallecano, sueña con despertar bajo los árboles floridos de mayo sin abandonar el sueño en el que reposa su ilusión: el de mantenerse en Segunda División o, quién sabe, ascender a cotas más altas.
Verde esperanza riega los montes de Cantabria, verdes barras vuelven a lucir su historia por los estadios del fútbol profesional, pero rojos son los puestos que el conjunto de Iván Ania ostenta en este momento.
Con dos puntos en su casillero, los santanderinos buscarán alzarse con la primera victoria de la temporada para salir catapultados de la vigésima posición. Para ello, deberán hacer olvidar las ausencias de Iván Crespo, lesionado, y Abraham Minero, sancionado.
Franjirrojo vestirá orgulloso el viernes, franjirrojo el Estadio de Vallecas, pero gris su ambiente. La afición, tal y como transmitieron sus representantes, ha decidido levantar la huelga de asistencia al templo rayista, por lo que sus gradas volverán a abrigarse como lo hacían antaño. Sin embargo, las discrepancias entre club y masa social no han amarrado en buen puerto. Por ello, pese a haber acordado el fin del boicot de asistencia, se ha dado pie a una nueva reivindicación: la huelga de animación.
Los vallecanos, undécimos en la tabla, tratarán de emerger de las profundidades del mar para tomar aire y asomar las velas de su navío a los puestos de playoff. De conseguirla, sumarían su segunda victoria esta campaña, tras la cosechada en Vallecas frente al Deportivo de la Coruña.
En cuanto al once, se esperan cambios, no sólo por la necesaria reestructuración del equipo de cara a la obtención de resultados, sino también por el hecho de que, en los próximos ocho días, los de Paco Jémez disputarán tres partidos frente a Racing, Málaga y Almería, respectivamente. Será, además, un duelo que volverá a enfrentar a dos clubes que no se ven las caras desde el año 2012, cuando los locales obtuvieron la victoria por cuatro goles a dos.
«Verde que te quiero verde». Verde césped. Verdes campos. El Rayo sobre su mar y el rival de la montaña. «Con la sombra en la cintura ella sueña en su baranda», verde grada, barrio verde, con ojos de división de plata.