El Rayo empata frente a la Ponferradina en un partido soso. Guerrero igualó el gol de Yuri de penalti, provocado por un Saveljich que acabó expulsado en el descuento.
El titular define a grandes rasgos el encuentro de este sábado en Vallecas. Pasamos del sopor de la primera mitad a la rabia en el final por la forma en la que el Rayo acabó el partido, que finalizó con empate a 1 tanto ante la Ponferradina.
Los resultados negativos de los de Iraola en semanas recientes implicaban que el duelo frente al conjunto que dirige la leyenda de la Franja Jon Pérez Bolo fuera una final por la última plaza de acceso al playoff. Pero por mucho que hubiera en juego, o precisamente por eso, los primeros minutos fueron de lo más insulso que se ha visto en la temporada, y eso es decir mucho. Lo único destacable del primer cuarto de hora fue una clarísima ocasión para los bercianos, en un rechace de Dimitrievski que dejó el balón a merced del remate de Valcarce, quien la estrelló en el pie del normacedonio.
Tras perdonar la Ponfe, persistió el sopor general en el patatal (no se puede llamar a eso «césped») vallecano. Entre un equipo visitante que dominaba sin peligro y un Rayo que vivía del balón largo a banda izquierda para que corra un Álvaro García que monopolizó el ataque local, añadiendo a esto que se jugaba a la hora de la siesta, nos deja a más de uno doblando el cuello frente a la tele. Solo en el tramo final parecían animarse los de Vallecas, teniendo como mejor ocasión un tiro cruzado de Guerrero tras un gran pase de Pozo. Pero poco más. El descanso llegó para acabar una primera parte llena de hastío entre dos equipos que se jugaban mucho.
La dinámica de sopor se mantuvo en el inicio de la segunda parte, en los 10 primeros minutos. Después, los de Iraola tratarían de lanzarse al ataque, comenzando sus amenazas con un balón de Andrés que se paseó por la línea de gol tras un leve desvío de Caro y sin que llegue a empujarla Guerrero. A partir de ahí, vimos un asedio rayista al área visitante que, si bien no terminaba de concretarse en gol, daba la sensación de que acabaría cayendo por su propio peso.
Sin embargo, un clásico reciente en Vallecas es pegarse tiros en el pie. El pie de Saveljich, para ser exactos. Como en su anterior titularidad, el central picó de pardillo en un amague que le tiraron en el área, en este caso obra del viejo zorro Yuri, zancadilleando al rival y provocando un penalti tan absurdo como claro. El propio Yuri se encargó de transformarlo con un remate para pasar por las escuelas de fútbol, fuerte y raso ajustado al poste derecho. Dimitrievski adivinó el lado, pero era inalcanzable. Cuando menos lo merecía, se adelantó la Ponferradina. Cuando mejor estaba, el Rayo se hacía el hara-kiri y se veía una vez más por debajo en el marcador.
Sin embargo, la dinámica no cambió con el gol, y eso hizo que los de la Franja respondieran rápido al golpe recibido. 4 minutos después, para ser exactos. Recibió el balón Álvaro García con espacio en la esquina izquierda del campo y con espacio para meter el centro preciso al rematador. Si el penalti de Yuri era de escuela, no lo fue menos el testarazo a gol de Guerrero: marcando los tiempos en el salto y girando la cabeza para impactar al balón como mandan los cánones. Caro alcanzó a tocarla, pero no evitó que se fuera al fondo de la red. Se estrenaba el refuerzo invernal del ataque franjirrojo poniendo el 1-1 en el minuto 70 y dándole al botón de «reset» del partido.
Los cambios efectuados por Iraola, entrando Joni por Pozo antes del penalti, Bebé y Qasmi por Óscar Valentín y Andrés Martín tras el empate y Mario Suárez y Ulloa por Trejo y el goleador Guerrero, dejaban clara la intención de ir a por el partido. Pero una cosa son las intenciones y otra la realidad. Rondó bastante la pelota el área berciana, pero no se generó mucho peligro. Las intervenciones que hizo Caro fueron en jugadas invalidadas por fuera de juego, y la mejor de las que tuvieron validez fue un remate fuerte de Qasmi a la media vuelta en la frontal, duro pero desviado.
Llegando el tiempo de descuento y con la rabia de no haber podido convertir la superioridad en goles, se mezclaba con esto un arbitraje tal vez algo quisquilloso con pitar mucho y muy insulso, pero que no tuvo incidencia real en el marcador. Con el colegiado pagó su frustración personal Saveljich, el autor del penalti, que tras ver amarilla por una falta en zona de tres cuartos, merecida por otra parte, se quedó protestando de forma airada, y el colegiado bajó el brazo de la tarjeta para volver a alzarlo y acto seguido mostrarle la roja. Tarde nefasta del central rayista, que se marchaba expulsado cuando quedaban 2 minutos de añadido, mostrando una actitud impropia de un profesional.
La inferioridad numérica no tuvo tiempo de ser un coste real para los locales. Llegó el final con empate a 1 gol. Otro partido que los de Iraola no ganan, y van 4 seguidos en liga, sumando un punto frente a su más inmediato perseguidor en la tabla. Las tablas sirven al Rayo para mantenerse una semana más en playoff, quedando en 6º lugar con 42 partidos, y a los de Bolo para seguir a un punto de la promoción y para ganarle el averaje a los de Vallecas.
Informó Jorge Morales García. Imagen: Twitter oficial Rayo Vallecano.