Javi Guerra entrena con el grupo con normalidad
El jueves 3 de marzo a las 21 horas el líder de la Liga visita al Rayo en Vallecas. Para preparar el partido contra el FC Barcelona Paco Jémez cuenta con dos bajas importantes: Pablo Hernández, que se lesionó el pasado viernes y no viajó a Sevilla, y Miku Fedor, que tuvo que ser sustituido en el descanso del partido contra el Betis.
Ambos jugadores estaban siendo piezas clave en la mejoría del Rayo Vallecano y se han visto azotados por lesiones musculares. Por un lado, se confirma que el pinchazo de Pablo Hernández se debe a una rotura fibrilar en el aductor mediano del muslo derecho que lo apartará del terreno de juego entre tres o cuatro semanas. El extremo ya causó baja durante casi un mes por otra dolencia muscular, concretamente una rotura en el bíceps femoral que notó mientras se disputaba el Rayo-Sporting de Gijón, en la jornada 5.
Por otro lado, se espera que Miku esté disponible un poco antes. El delantero venezolano sufre una microrrotura en el bíceps femoral del muslo izquierdo que le mantendrá en el dique seco entre dos o tres semanas. La de Miku es, quizás, la baja más significativa de cara al partido contra el Barça de Luis Enrique, ya que sus cinco goles mostraban que el delantero estaba en estado de gracia.
Por suerte, Jémez sí podrá contar con Manucho, autor de los dos goles del empate del Rayo en el Benito Villamarín y del 2-1 del Rayo-Sevilla. La duda aún está en si llegarán en perfectas condiciones Javi Guerra, que ya entrena con el grupo, y Jozabed, que de momento se mantiene entre algodones y esta mañana ha realizado varias series de carrera continua con el recuperador de lesiones, Victor paredes.
Mañana será el día en el que se saldrá de dudas. El entrenamiento previo al partido de la jornada 27 será a puerta abierta y está previsto para las 18:00 horas en el Estadio de Vallecas.
Un Trackback en este artículo.
[…] de los que dispone Paco Jémez, incluidos Jozabed, Miku y Pablo Hernández, que continúan con su puesta a punto. Por los pelos llegó Aras Özbiliz. El armenio tenía que solucionar unos trámites personales por […]