Móstoles URJC y Rayo B empatan (1-1) en El Soto un partido trepidante con dominio visitante. Se adelantaron los locales, igualó Sergio Moreno de penalti.
Cuando juega el Rayo B, independientemente del resultado, la emoción está asegurada. Así fue este domingo en El Soto, donde cortó la racha de derrotas como visitante con un empate ante el CD Móstoles URJC (1-1) que bien pudo ser un triunfo.
Nuevamente una mañana de tinte primaveral animaba a la gente a disfrutar de un buen rato de fútbol en el mítico estadio mostoleño. Desde el comienzo del encuentro dejó claras sus intenciones el Filial de la Franja, que salió a buscar el balón, a dominar el juego terrenal y a plantarse en las inmediaciones del área rival. Los azulones, por su parte, se adaptaron bien al papel que les proponía el cuadro vallecano y esperaron agazapados su oportunidad. En el primer cuarto de hora la pelota apenas salió de la mitad de campo local, controlada por un Rayo B que quería tocar y encontrar huecos para disparar.
La primera acción de ataque de los de Salva Ballesta, y prácticamente la única en la primera mitad, sacó réditos inesperados. Era el minuto 19. Lo que parecía un disparo horrible de Pantoja se convirtió en una apertura al lado izquierdo para Chupe, quien controló cerca del córner y lanzó el centro al punto de penalti para que se levantase Bourdal como un cohete y cabecease de manera impecable, haciendo que la bola describiese una parábola en el aire tal que Morro por más que saltase no podría alcanzarla jamás. Con la pelota alojada en el fondo de la red, se ponía por delante el Móstoles URJC ante la euforia de su hinchada y la estupefacción de un Rayo B que estaba siendo más.
Al sacar de centro se puso el cuadro vallecano a buscar la igualada, y aunque mantuvo el dominio posicional, había algo que no terminaba de convencer a Luis Cembranos más allá del resultado. De ahí hasta el descanso, el muro azul dispuesto sobre el área local hizo que probaran suerte desde fuera del área Ángel Algobia y el capitán Pipe Sáez con un tiro libre, yéndose ambos ligeramente por encima del larguero. Se acabó la primera parte con el mensaje de que estaba valiendo más la eficacia que el trabajo, pues el Rayo B era el que proponía el juego, pero ganaba el Móstoles URJC por haber convertido en la única oportunidad que tuvo.
Busco soluciones Cembranos con un cambio en el descanso, dejando en la caseta a Algobia para que entrase a jugar Adrián Carrasco, máximo artillero rayista que emergió desde el banquillo. Apenas llevábamos 5 minutos de segunda parte, en los cuales no hubo mucho que destacar, cuando llegó la acción del tanto visitante. Alberto, el hombre encargado de la sala de máquinas vallecana, fue a presionar un balón que Chupe quería dejar salir por la línea de fondo, pero ante la presión del mediocampista optó por cuerpear y tratar de despejarlo. El atosigamiento de Alberto hizo que el lateral azulón se fuese al suelo, y en la caída, golpeó la pelota en su brazo. Lo vio el colegiado. Pese a la involuntariedad, la mano existía, así que no quedaba sino señalar el penalti. Se hicieron caso omiso a las protestas locales y se preparó Sergio Moreno para ejecutar la pena máxima, El 9 iba a poner fin a su sequía goleadora con un disparo raso ajustado al poste derecho de un Aitor que se lanzó al lado opuesto. Desde los 11 metros llegaba el empate del Rayo B y, por fin, el sexto gol de Moreno en la temporada.
Un rato después del gol ingresó Álvaro Juan por Migallón, y entramos en los momentos de más emoción del partido, pues aunque seguía estando mejor plantado el Filial de la Franja, se vino arriba el Móstoles URJC y buscó la ventaja. Fueron pocos los acercamientos azulones, pero todos entrañaron peligro, destacando una chilena fallida de Villa y un par de balones aéreos que obligaron a Morro a sacar los puños. Esto no significó, ni mucho menos, que el Rayo B se tuviera que echar atrás. Seguía jugando más en campo de su rival, el cual buscaba en las contras la forma de matar el partido a su favor.
Lo del Rayo B era algo más que dominio, también eran acercamientos peligrosos y fuerte presión arriba. Aquí merece un capítulo especial Ketu Kalvin, que dejó sus pulmones en el verde de El Soto y provocó más de una pérdida mostoleña en zonas comprometidas. En cuanto a las ocasiones, el Filial de la Franja había ganado en presencia ofensiva con sus permutas, asumiendo Carrasco los galones habituales y probando desde la frontal a Aitor, pero sin suerte.
El partido parecía tornarse de ida y vuelta entrando en los 10 minutos finales, pero lo evitaron los franjirrojos con movimientos rápidos y certeros de pelota. Apenas quedaban 5 minutos cuando entró Oliva por Kalvin para jugarse el todo por el todo, y al instante se tuvo la mejor ocasión para hacer el gol de la victoria. Se paseó Carrasco por la frontal del área con el balón cosido al pie, concentrando sobre sí a varios defensores. Alcanzó la media luna, y cuando todos esperaban su disparo, cedió a su derecha para que llegase Sergio Moreno y definiera solo ante Aitor. Posición propicia para que Moreno buscase la definición por alto. No sé si llegó a tocar el portero, pero el caso es que el grito de gol rayista se ahogó al rebotar violentamente el cuero en el larguero. Recogió el rechace Álvaro Juan, que no se lo pensó dos veces y tiró, pero el balón se paseó por delante de la línea de gol y se perdió cerca del poste izquierdo. No se podía creer la ocasión que dejó escapar el Rayo B, que a buen seguro valía la victoria sobre el final.
En los 3 minutos de descuento ya fue jugársela a todo o nada para ambos bandos, y de ahí el Filial de la Franja solo sacó la que es la 5ª amarilla para Manu Navarro, que tuvo que enganchar a un rival para evitar una contra, acabando otro gran partido para el mediocentro sabiendo que será baja para la visita del Atlético de Pinto a la «City». Por lo demás, al acabar el partido el marcador reflejaba el 1-1. Partido de gran emoción y disfrute para el espectador que dejó un sabor agridulce para el Rayo B. En la parte positiva, se dejó de perder fuera de casa, y en la negativa está el saber que se mereció y se pudo ganar en un campo muy difícil. Queda el Filial de la Franja 10º con 35 puntos, a 10 del playoff, y sueña con recortar esa distancia en los dos partidos seguidos que tiene ahora como local.
FICHA TÉCNICA
CD Móstoles URJC: Aitor (p.), Álex Alonso, Bourdal, Fratelli (cap.), Montávez, Juancar, Morato, Villa (Marcos m.80), Chupe, Jime (Cortázar m.74) y Pantoja (Theo m.57).
No utilizados: Nando (p.s.), Adama, José Vega e Iván. Entrenador: Salva Ballesta.
Rayo Vallecano B: Miguel Morro (p.), Javi Rubio, Pipe Sáez (cap.), Meseguer, Martín, Manu Navarro, Kalvin (Oliva m.86), Ángel Algobia (Carrasco m.45), Sergio Moreno, Alberto y Migallón (Álvaro Juan m.61).
No utilizados: Dani Merino (p.s.), Aguado, Kike Hermoso y Guille Nieto. Entrenador: Luis Cembranos.
Árbitro Sr. Benítez Delgado. Amonestó a Morato y Pantoja en el Móstoles URJC y a Migallón, Meseguer y Manu Navarro en el Rayo B, así como al entrenador del Móstoles URJC Salva Ballesta.
Goles: 1-0, m.19, Bourdal. 1-1, m.51, Sergio Moreno de penalti.
Estadio El Soto, unos 400 espectadores. Partido correspondiente a la 26ª jornada del Campeonato Nacional de Liga, Tercera División, grupo VII. Mañana soleada y cálida. Césped natural en condiciones mejorables para la práctica del fútbol.
Informó Jorge Morales García. Imagen de Iván Díaz.