Arrancó el campeonato de Liga Nacional Juvenil y no lo hizo de la forma deseada para el Rayo Vallecano en cuanto a puntuación, pero sí en cuanto a juego desplegado.
Que el fútbol no es justo, ya lo sabemos. Que los partidos no se ganan por méritos contraídos, también lo tenemos claro. Son obviedades que quedan resumidas en frases como «el fútbol es así», «fútbol es fútbol», etc. Particularmente, sin negar su parte de razón a los que pronuncian estas frases, soy de los que piensa que si juegas mejor que el rival, pones sobre el terreno de juego, durante los 90 minutos, más argumentos para llevarte los tres puntos, serán más las veces que ganes que las que pierdas.
Sirva lo anteriormente escrito como preámbulo de lo que fue el partido que disputó el Juvenil B de Jorge Rubio ante el CD San Fernando Juvenil A. Los nuestros se estrenaban en Liga Nacional ante un rival complicado y un año mayor. Esto no es nuevo para el equipo, ya que la temporada pasada fueron los benjamines de su grupo, pero a medida que subimos categorías, el nivel también se incrementa.
El partido iba a comenzar sin defraudar las expectativas creadas de antemano. En apenas dos minutos, asistimos a un primer acercamiento peligroso del conjunto rival que acabaría con un centro lateral muy peligroso que se iba a pasear por el área rayista sin encontrar rematador. La réplica de los franjirrojos no se hizo esperar y Morci iba a enganchar dentro del área un balón muerto servido de cabeza por un compañero y su disparo cogería portería, pero bajo palos se iba a encontrar con un defensa del San Fernando contra el que se estrellaría el esférico.
Espoleado por esta ocasión, el Rayo se fue creciendo y Morci, de nuevo, con un cabezazo que se marchó desviado, pudo abrir el marcador tras un gran centro de Alexis, que fue una pesadilla con sus constantes subidas por banda para la defensas rival. El siguiente en intentarlo fue Alcántara, que agarró un balón en tres cuartos de campo y fue sorteando rivales hasta llegar a la frontal del área donde disparó cruzando en exceso el balón.
Los nuestros estaban logrando sorprender al San Fernando, que no era capaz de contrarrestar el fútbol ofensivo del conjunto rayista, bien dirigidos desde el centro del campo con Capi y Prieto, enganchando con Hugo por detrás de Morci. En los costados, tanto Alcántara como Quique, recibían las ayudas del anteriormente citado Alexis y de Aarón. Precisamente, de este último sería la siguiente ocasión de peligro tras una cabalgada por banda derecha, buscó sorprender con un lanzamiento lejano, pero se encontraría con la pierna de un rival que desviaría la trayectoria de una balón que cogía claramente portería.
Lejos de amilanarse, el San Fernando, primero con una falta de Alberto que se va por muy poco y, posteriormente con un centro chut envenenado por banda derecha, buscó el gol que le adelantase en el marcador. Como si de un combate de boxeo se tratara, los siguientes dos golpes iban a llegar por parte local con un cabezazo de Morci que se iba a estrellar contra el palo y con una ocasión muy clara para Quique, de esas que no suele desaprovechar.
Con el susto aún en el cuerpo, el conjunto rival comenzó a buscar balones largos a la espalda de la defensa rayista. En primera instancia, Merino iba a encontrarse con la salida de Dani, el guardameta rayista, que iba a llevarse el gato al agua en el mano a mano con el delantero del Sanfer, pero en una jugada casi idéntica el nueve visitante se tomaría su particular revancha y el balón iba a acabar en el fondo de las mallas. Gol que iba a llegar segundos antes de decretar el árbitro el final de la primera mitad.
El gol fue un mazazo duro, pero no mermó las ganas de lograr los tres puntos de los franjirrojos, que tuvieron que mover el banquillo en el descanso al finalizar Quique sobrecargado la primera mitad. En su lugar iba a entrar Mario linares que se situaba en una línea de tres defensiva junto a Ordóñez y José Ángel, con Alexis y Aarón como carrileros y Alcántara jugando en punta cerca de Morci. El cambio de sistema de Jorge Rubio pareció sorprender al San Fernando, que iba a ver como pudo llegar el empate en botas de Hugo García y en la cabeza de Ordóñez, tras sendas ocasiones de peligro consecutivas.
No tardaría en llegar el empate rayista, fruto de una buena jugada personal por banda izquierda de Alexis que ponía un balón en el área y, tras una serie de rechaces, el árbitro señalaba mano de un defensor del San Fernando. Penalti muy discutido por el conjunto visitante, que se encargaría Alcántara de anotar.
Tanto Morci como Alcántara sumaron nuevas ocasiones de gol para obrar la remontada rayista, pero el balón parecía no querer entrar en el marco visitante. Se pidió una nueva mano en el área del Sanfer, pero el colegiado no consideró que fuese penalti en esta ocasión.
Corría el minuto 72 cuando el San Fernando repetía balón largo a Merino, que se plantaba solo ante Dani, disparando al palo izquierdo, pero el rechace iba a quedar franco para que Alberto fusilara a placer a Dani, que tuvo una grandísima actuación en el partido, pero poco pudo hacer en ambos goles.
Siguieron los cambios en el conjunto franjirrojo en busca de dar la vuelta al marcador, pero no se movería más y el San Fernando se llevaría los tres puntos en juego.
El partido deja bastantes lecturas positivas, como es el debut en Liga Nacional de Isra y Álvaro Torres, jugadores juveniles de primer año. El hecho de que hasta tres jugadores (Quique, Ordóñez y Prieto) acabaran muy sobrecargados, teniendo que ser atendidos antes de retirarse sustituidos, habla de la intensidad que los chicos pusieron en el partido. En líneas generales, el míster acabó satisfecho con la actuación de sus chicos y así se lo hizo saber una vez finalizado el encuentro, en el habitual corro que forma todo el equipo al final de los partidos.
Próximo partido: ED Moratalaz B – Juvenil B. Sábado 7 de noviembre, 16.00 horas.
