Análisis de la primera vuelta del Rayo Vallecano

“No ha sido mala, pero podría haber sido mejor. Se nos han escapado muchos puntos en casa”. Así de tajante se muestra Paco Jémez al hacer balance de la primera vuelta del Rayo Vallecano. La verdad es que no le falta razón. Los vallecanos han terminado la primera mitad de la temporada en el décimo puesto de la tabla con 23 puntos, de los cuales 16 se han logrado fuera de casa y solo siete en Vallecas. Tanto equipo como afición  tienen muy claro que algo sucede y que las visitas a la casa rayista son un regalo para los rivales, en muchas ocasiones de “su liga”, como Eibar o Elche. Las derrotas más dolorosas en Vallecas han sido por claros errores defensivos, frente a Sevilla, Espanyol o, más recientemente, Córdoba, por poner ejemplos.

En lo referente a la plantilla, Paco Jémez se ha enfrentado al reto de crear un equipo competitivo desde los cimientos, con 20 fichajes nuevos. La situación ha hecho que el técnico pruebe numerosas combinaciones tácticas. La pizarra del entrenador franjirrojo ha sido testigo de líneas defensivas de tres, de cuatro, trivotes en el centro del campo y hasta de una defensa sin centrales. Resumiendo, nunca ha repetido once inicial. Los tres porteros de la plantilla vallecana han pasado por la enfermería en esta primera vuelta. Eso ha hecho que Toño se haya ganado el puesto de portero titular y sea indiscutible bajo palos.

Se ha demostrado que categorías inferiores como Segunda División o Segunda B pueden ser una excelente fuente de refuerzos. Jugadores como Jozabed o Álex Moreno han maravillado a la parroquia vallecana con su talento y juventud. El mediocentro ya se ha permitido el lujo de sentar a Trashorras en el banquillo; y el de Sant Sadurní d’Anoia ha aportado peligro y velocidad con sus carreras por la banda. No solo las nuevas incorporaciones se han hecho notar. Raúl Baena ha realizado una buena mitad de temporada y se ha consolidado en el esquema jemecista. A pesar de ello, son otros los jugadores que más encuentros han disputado en este Rayo. Kakuta y Manucho son los únicos que han pisado el verde en todos los choques, con una diferencia, el francés lo ha hecho como titular y «La Palanca negra” como suplente, en la mayoría de las ocasiones. En el lado opuesto se encuentran Lass (antes de viajar rumbo a Granada) y Embarba, con solo un partido jugado.

Esto es fútbol. Aquí, importan los goles. Al final de la primera vuelta, el Rayo Vallecano había marcado 20 tantos y encajado 33. Leo Baptistao era -y es- autor de siete goles, seguido de Alberto Bueno, que llegó a la jornada 19 con seis tantos (frente al Dépor en casa sumaría uno más). En materia de amonestaciones, dos rayistas han visto la cartulina roja, ambos frente al Barcelona: Jorge Morcillo y Javier Aquino. Si hablamos de tarjetas amarillas, Abdoulaye Ba se lleva la palma tras acumular nueve. Este dato hizo del senegalés el jugador más tarjeteado de la Liga durante la primera parte de la competición, un liderazgo que mantiene a día hoy tras haber llegado a las diez amonestaciones.

Centrando la atención en la segunda vuelta, los de Jémez tienen que pulir sus errores defensivos, mejorar su puntería y romper su mala racha en casa. “Estoy convencido de que haremos una buena segunda vuelta”, dijo Míchel recientemente en el programa de radio MATAGIGANTES. Ojalá tenga razón y este Rayo pueda permitirse soñar con algo más.

Marian Lucendo

(Foto: Rafi Alameda)