Últimos por méritos propios

No busquen responsables más allá de Payaso Fofó, ni siquiera traten de echar balones fuera culpando a empleados ya despedidos, a errores de Excel, a la jubilación del auditor o al desconocimiento de la normativa, si somos los últimos es por méritos propios, por méritos del señor Raúl Martín Presa.

El último escándalo en estallar a la luz pública, ha sido descubrir que somos la afición que más pagamos por las entradas visitantes cuando nos desplazamos fuera de Vallecas, todo por obra y cabezonería de nuestro querido presidente.

Y es que simplemente, en este próximo viaje pagaremos en entradas aproximadamente 4.000 euros más de lo que pagarían la afición del Real Zaragoza, del Getafe o del Elche si se desplazasen a Valladolid, en igual número que nosotros.

Somos el farolillo rojo, los últimos en el ranking de las entradas visitantes más asequibles.

Para entender esta situación nos tenemos que remontar unos cuántos años atrás, cuando aún jugábamos en Primera División.

En una magnífica idea la LFP en coordinación con Aficiones Unidas (Asociación de Federaciones de Peñas de Fútbol), y Burger King, en la temporada 2012/2013 firman un acuerdo con el fin de facilitar el desplazamiento de los aficionados de Segunda División como seguidores visitantes, a un precio reducido de 15 euros, que incluía entrada y menú.

La iniciativa desde sus inicios fue todo un éxito, con un cupo inicial de 300 entradas por partido, permitía hacer más llevaderos los gastos que conllevan seguir al equipo de tus colores por cualquier estadio de España.

Actualmente, el acuerdo Paquete King, como se conocía coloquialmente, se ha transformado en un Convenio de Marketing entre la Liga y los clubes, en los que se fijan multitud de acuerdos tales como la publicidad perimetral, la trasera de las entrevistas, etc y también el cupo de entradas a precios reducidos de 15 euros para los aficionados visitantes de la segunda división, que fue ampliado este año de 300 hasta un máximo de 500 entradas por partido.

Todo son ventajas para los clubes y aficiones:

• Contraprestación económica para los clubes cercana a los 45.000 euros, por su firma.
• Entradas reducidas a 15 euros hasta un máximo de 500 por partido, para facilitar el desplazamiento de tu afición a otros estadios.
• Entradas reducidas a 15 euros hasta un máximo de 500 por partido, para facilitar que otras aficiones se desplacen a tu estadio.
• Pago asegurado de 1.500 entradas a 15 euros al Club por temporada, aunque no venga ni un solo aficionado visitante a tu estadio.

Pues bien, en la temporada 2016/2017 el Convenio fue firmado por 21 de los 22 equipos de la Segunda División, todos menos el Rayo Vallecano.

Presa se negó, despertando la incredulidad de la Liga y Aficiones Unidas, por semejante decisión que no solamente encarecía de forma sensible los desplazamientos de sus propios aficionados, reducía la generación de ingresos de bares y restaurantes en Vallecas por la visita masiva de aficionados rivales, sino que también dejaba de recibir el club una importante contraprestación económica.

En el último fin de semana de agosto, justo en el primer partido en casa contra el Real Valladolid, el inexplicable comportamiento del Sr. Presa hizo saltar las alarmas en la Liga.

Resulta que la Federación de Peñas del Real Valladolid realizó una petición de 100 entradas, siguiendo el protocolo indicado en el Convenio, que su club sí que tenía firmado, es decir correo electrónico a Aficiones Unidas con la relación de los aficionados que se iban a desplazar y transferencia a la cuenta habilitada por la LFP al respecto.

Sin embargo, el Rayo Vallecano se negaba a facilitar las entradas al precio reducido de 15 euros, a pesar de que ya estaban pagadas. La situación requirió la intervención de las más altas instancias de la Liga, y debido a las fuertes presiones recibidas, Presa cedió y los seguidores pucelanos pudieron venir a Vallecas.

Según me ha comentado el Presidente de las Peñas del Real Valladolid, jamás han tenido problema ninguno con el protocolo de las entradas de visitantes en ningún campo de España, excepto en Vallecas.

Esta primera queja de la afición pucelana, fue solamente la punta del iceberg de las quejas que se formularon por la práctica totalidad de las aficiones en la Reunión de Seguridad de la Liga y Aficiones Unidas celebrado apenas un mes más tarde en Madrid, por la falta de firma del Convenio por parte del Rayo Vallecano. Y se trasladó la indignación a la LFP.

Finalmente, ante las fuertes presiones existentes de la Liga y Aficiones Unidas,  Presa firmó el Convenio pero reduciendo el cupo de entradas de 500 como la práctica totalidad de los equipos, a unas raquíticas 100 entradas por partido.

Esto quiere decir que el Convenio del Rayo Vallecano dispone de 2100 entradas para desplazamientos a estadios rivales, cuando la gran mayoría de los equipos disponen para sus aficiones de 10.500 entradas.

Se lo explico de otra forma, si la afición del Rayo y del Levante, desplazasen 500 aficionados a cada de sus 21 jornadas como visitantes (al mismo precio que la entrada en Zorrilla), los rayistas pagaríamos de nuestros bolsillos 84.000 euros más por la compra de las entradas, que nuestros amigos granotas.

Somos la afición que más paga por las entradas en sus desplazamientos, el estadio español más caro para un aficionado visitante y el Rayo Vallecano, para más inri, percibe una contraprestación económica inferior por la firma del convenio, por no adherirse al cupo máximo de entradas.  Todo un negocio.

Gracias al desconocimiento de los equipos a los que visitábamos en la primera vuelta, jornada tras jornada, la afición rayista en sus desplazamientos iba sorteando esta traba, con la inestimable ayuda de la LFP y de Aficiones Unidas que intervenían y facilitaban el exceso de entradas solicitadas, salvando la cara a Presa.

El problema surge en el viaje a Córdoba, en la jornada 20, porque el club andaluz, que sí que sabía que el Rayo Vallecano solo se había comprometido a 100 entradas, se niega a tramitar la petición de 145 entradas a precio reducido solicitadas por las peñas rayistas. Alegaban motivos de reciprocidad, ya que en el partido de vuelta la afición cordobesa solo recibiría 100 entradas.

Otra vez más, Aficiones Unidas y la más altas instancias de la Liga tuvieron que intervenir para resolver el desaguisado, y convencer al Presidente del Córdoba. Este aceptó ,excepcionalmente ,a facilitar el desplazamiento porque las peñas rayistas ya tenían el viaje totalmente organizado y pagado. Y la Liga, avisó que no podía estar mediando continuamente.

Y lo grave viene ahora que estamos en la segunda vuelta, y todos los clubes ya conocen el Convenio firmado por el Rayo Vallecano. Este problema se va a repetir jornada tras jornada, ya que los equipos se niegan por reciprocidad a facilitar más de 100 entradas a precios reducidos, y esta decisión, la sufren los bolsillos de los rayistas.

Y como era previsible, justo en el primer partido como visitante de la segunda vuelta, ha saltado de nuevo la polémica, el Real Valladolid  solamente facilita las mismas 100 entradas firmadas por Presa en el convenio. Por dicho motivo, hace más de dos semanas que peñas rayistas están intentando convencer a Presa para ampliar el cupo hasta las 500 entradas,  y así facilitar que los desplazamientos sean más económicos y masivos para la afición franjirroja. Pero Presa de nuevo se niega, por motivos que solamente él conoce y entiende.

Según la versión del club, no firmaron en su día el Convenio por desconocimiento de la normativa al respecto, y posteriormente solo aceptaron el cupo de 100 entradas, en vez de las 500, porque dudan de la credibilidad de la Liga para efectuarles el pago. Inaudito.

La versión que se escucha entre responsable de las distintas Federaciones de Peñas de los restantes equipos, expertos en la relación Club-afición, es muy distinta. Opinan que Presa no quiere tomar ninguna decisión que pueda beneficiar a la masa social rayista. Triste.

Quédense con la versión que más les guste, les convenza o les plazca, yo lo único que sé que  esa cabezonería nos está produciendo un enorme perjuicio, encareciendo por ejemplo, el viaje de la Plataforma de este fin de semana (autobús + entrada) de 27 euros a 37 euros, justo ahora cuando el equipo más lo necesita.

Lo comentado anteriormente, se refleja muy bien en el gráfico de porcentaje de entradas visitantes facilitadas en relación al aforo del estadio, donde ocupamos el puesto nº 22, es decir los últimos de la Segunda División. Solamente cedemos un 0,69% de nuestro estadio a precio reducido para favorecer la visita de aficionados rivales, frente al  9,09% que pone a disposición el Huesca.

Seguro que a los bares y restaurantes del entorno cercano al estadio, no les hace ninguna gracia saber, que según el último estudio realizado por la Consultora KPMG “Impacto socio-económico del fútbol profesional en España”, y según su estimación de gasto medio en hostelería de un aficionado visitante en Segunda División, esta decisión de Presa les produce un perjuicio potencial de 268.000 euros.

De igual forma, ocupamos la última posición, en la clasificación del número de entradas facilitadas para el desplazamiento de equipos rivales a Vallecas, y por tanto, por motivos de reciprocidad, somos la afición que menos entradas reducidas recibe a la hora de desplazarnos.

Así, el Rayo Vallecano se sitúa junto con el Reus como los dos únicos equipos de la categoría que solamente entregan 100 entradas a precios reducidos. Con una gran diferencia, el equipo catalán que dispone de un estadio con  capacidad de 5.000 espectadores, una tercera parte que el nuestro, permite la ampliación de dicho cupo en aquellos partidos donde no tienen previsión de llenar el estadio, como sucedió en la jornada 7º cuando su gerente se puso directamente en contacto con la afición rayista para ofrecer mayor número de entradas. Todo un ejemplo a seguir.

De los 20 equipos restantes, 4 tienen un cupo de entradas visitantes de 300 entradas (UCAM, Lugo y Numancia por motivos de aforo de su estadio, y el Cádiz permite la ampliación del cupo), y los restantes equipos, es decir 16, disponen de hasta 500 localidades para facilitar el desplazamiento de los aficionados visitantes.

Destacan positivamente sobre el resto, equipos como el Huesca, Alcorcón o Mirandés con estadios con una capacidad no superior a 7.000 espectadores, acogidos al cupo máximo de las 500 localidades.

Y este es el resumen, del último sinsentido de Raúl Martín Presa, realizado en dos etapas, la primera negándose a firmar un convenio que entre otras ventajas, permitía el desplazamiento de tus aficionados a entradas con precios reducidos, y posteriormente tras presiones de las más altas esferas de la Liga, y una vez empezada la competición, firmándolo pero con las peores condiciones de todos los equipos de Segunda División, en un claro perjuicio para el bolsillo del seguidor rayista de hasta 84.000 euros y de la generación de ingresos  en los negocios del barrio de hasta 268.000 euros.

Raúl Martín Presa, hágase un favor así mismo, háganos un favor a todos, márchese a su casa, y deje la gestión del club en manos de profesionales.

David Rodríguez. Gestor Deportivo RFEF/FIFA.