Esta semana Alberto Leva llega cargado de preguntas sobre el fútbol femenino y con un inquietante sueño: Ver al Rayo de Diego Merino en la final de la Copa del Rey Juvenil. ¿Habrá un duelo ‘Uche versus Faruq’ en Ceuta?
Mal día he elegido para rescatar estos lunes al sol. De hecho, han tenido que venir mis adorables octogenarios a rescatarme a mí y a pronunciar las palabras mágicas, esas de «vente al bar, anda»; tengas la edad que tengas si eres hombre no suelen fallar y dan resultado. Sobre todo si empezaban a caer chuzos de punta sobre mi banquito de lunes. Me preguntan con curiosidad los abuelillos que sobre quién o qué voy a escribir si los futbolistas que ganan buenas perras, conducen coches cojonudos, de esos automáticos que andan solos, y que tienen todos unas novias cojonudas, ya han dejado de jugar y hasta de entrenar hace casi un mes. Antes de dejarme responderles, uno de ellos me hace la pregunta del millón, y es que por qué dicen que los contratos duran hasta el 30 de junio si a mediados de mayo alguno ya está en Ibiza o incluso han visto la pirulilla a Ronaldo meando en la calle.
A la segunda pregunta no tendría huevos a responderla ni el mismísimo Iker Jiménez, así que me centro en la primera que es algo más sencilla. Le digo que los juveniles del Rayo siguen compitiendo en la Copa del Rey, que están en semifinales y a un pasito de la final. Ahí llega otro de mis curiosos amigos y me pregunta que si llegamos a la final y ponen el himno de España los bukaneros, que tienen mucha guasa -son fans de montajes de Epi y Blas, los Simpson,etc…- ,pitarán el himno o no. Cómo se nota que es lunes y que, como llueve, no pueden salir y sacian su curiosidad conmigo. Hasta que uno saca el tema de la política y empiezan a hablar de la alcaldesa nueva, la Karmele -juro que esto es totalmente verídico- a lo que ya se forman los dos bandos y yo paso a un quinto o sexto plano.
Pues sí, los chicos de Diego Merino se han empeñado en tenernos pendientes de ellos hasta el mes de julio. A alguno le va a tocar dejar a la mujer, a los niños, a la suegra, las cuatro maletas, las tres bolsas con puchero y las bicis de los niños en el pueblo y volverse él a ver lo que queda de Copa del Rey. Algunos están tan contentos por esto, a mí no es que no me haga ilusión que los chavales ganen, pero yo imagino a un tipo de mirada ágil y pelo ondulado riendo y acariciando a un minino, mientras piensa en subirnos los abonos del año que viene, ya que gracias al Juvenil el de este año le estamos sacando un partido cojonudo. Abonos que, al pobre y sufrido padre de familia de antes que ha dejado a toda su tropa en el pueblo, le harán volver de nuevo a mediados de julio, por la tarde, con 40 grados a la sombra y ranas con cantimplora, entrando al Cota a repostar para poder sacarse el abono de la temporada próxima. Hasta entonces el Rayo no habrá sido capaz de sacar el abono de la próxima temporada y, de nuevo, habrá vuelto a ser colista en el tema de abonos.
Ojalá llegue el día que la venta de abonos de la siguiente campaña sea equiparable al día en el que los futbolistas se van de vacaciones. Volviendo a nuestra «banda del bate», como comentaba, están a un pasito de ser finalistas de Copa del Rey, hecho único e inédito en la historia del Rayo Vallecano, que supongo que los seguidores viviremos como se merece y le daremos la importancia que no le da el club. Toca defender en Vigo un 3-1, resultado sacado ayer en la City a base de momentos de juego de gran calidad, destacando en esta parcela Jorge Shafa, que es un poco el Trashorras del Juvenil, al que se le presupone una calidad única pero que muchas veces peca de pichafloja y no la saca al 100% a relucir. Tuvimos momentos de garra, pelea y sobre todo mucha astucia, como fueron los dos goles últimos a balón parado donde aparece el capitán del equipo, el veterano de 18 años, Pablo Clavería, dando uno y marcando el otro.
Si el equipo se mantiene a su nivel habitual lo lógico es que estén en la final del campeonato. Lo que no se sabe aún es dónde se jugaría, ya que la sede fijada era la ciudad de Ceuta, que también tiene su guasa que «la banda del bate» tuviera que ir a jugársela al barrio de «El Príncipe»: Uche versus Faruq. El rival a priori sería el Real Madrid, que en la otra semifinal derrotó en su campo al Valencia CF por 4 goles a 1 y dicen que su presidente ya se ha apresurado a pedir el cambio de sede a Madrid, con más motivo aún si los dos finalistas del torneo son de aquí. Esperemos que los chicos lleguen a tan ansiada final y lejos de tópicos sobre las finales, que la disfruten como se merece, que sean conscientes de lo complicado que es llegar donde han llegado y que disfruten y hagan disfrutar a esos familiares y amigos que les siguen por media España cada dos semanas. Porque si las criaturas son grandes, no menos grandes son los que tienen por detrás apoyándoles incondicionalmente. No me cansaré de decir que uno de los grandes secretos de este Juvenil A es que es una gran familia en todos los aspectos, dentro y fuera del campo. Gracias chicos por regalarnos a todos los rayistas una temporada así -aunque nos suban el abono, jejeje-.
No me gustaría despedirme sin acordarme de otro de «mis equipos», el Rayo femenino, ese equipo que a pesar de ser de Primera División no se ha ido de vacaciones a mediados de mayo. Debe ser que en sus contratos firmados con tinta invisible no ponía fecha, ni cantidades, ni duración, ni condiciones, etc. Vamos, lo que viene siendo NADA. Por no tener, las chicas no tienen ni los famosos flecos que separaban a Paco Jémez de renovar con el Rayo Vallecano.
Calladas, cumplidoras, dando la cara, entrenando religiosamente a pesar del calor de la City, jugando los amistosos que el club les ha dispuesto frente a universidades americanas y por los que supongo el club habrá COBRADO. Ahora por fin, a mediados… de junio, les llega la hora de disfrutar de unas más que merecidas vacaciones, y esto es todo lo que el club les ha comunicado…
Entre tanto vamos viendo a diario como la Real Sociedad tiene que dejar marchar a más de medio equipo, como el Espanyol de Barcelona sugiere que igual el año que viene tiene que competir en Primera División con el conjunto filial porque reducen a la mínima expresión el presupuesto. Nosotros no sabemos nada, dado el silencio administrativo de nuestro presidente. Silencio que no se ha dignado a romper a pesar de que éste que escribe le ha escrito para interesarse por el estado de la sección, porque me preocupa y siendo absolutamente sincero me preocupa bastante más que el hecho de que el abono lo tenga que renovar en julio, que renueven a Manucho o fichen a Elustondo. Hablo en este caso del futuro de 18-20 chavalas que he tenido la suerte de conocer y, en algunos casos, de tratar bastante con ellas. Y de verdad merece la pena luchar y apoyarlas para que esta sección siga viva, tal y como lo han hecho ellas en el terreno de juego, incluso estando «muertas» y acalambradas perdidas.
Esta es la jodida realidad que vive el fútbol femenino en España, aunque ahora parezca todo de color de rosa porque juega la selección un Mundial. Sí, eso es muy «chupi», pero luego no estaría mal llenar durante el año las gradas vacías o semivacías de campos como el nuestro de la City. Hace poco mi amigo Josep María Miedes ponía el dedo en la llaga con este texto, «los polos opuestos«.
Para finalizar, a mí me asaltan varias dudas. Teniendo una Ciudad Deportiva tan cojonuda como tenemos y teniendo el ejemplo del Campus de Alberto Bueno, ¿por qué no un Campus Alicia Gómez? ¿Por qué hacer un campus femenino… en Córdoba? ¿No había un sitio más lejano y más caliente en el planeta Tierra? ¿Por qué no lo trabajan y lo dirigen las chicas del primer equipo y segundo equipo del Rayo Vallecano femenino? ¿Por qué se deja en manos de varias empresas la organización de dicho campus? ¿La Fundación del Rayo Vallecano tiene tan poca capacidad organizativa como para no poder llevar a cabo un campus de fútbol femenino? ¿Por qué teniendo a 140 niñas en la Fundación, (cada una paga unos 570 €) las cuales generan unos 80.000 € al año, seguimos diciendo que el fútbol femenino no es rentable? ¿A qué se destina ese beneficio que generan estas 140 niñas, al propio fútbol femenino? ¿No da la Comunidad de Madrid una subvención de 45.000 euros al Rayo Vallecano para su sección femenina? ¿Ahora con el famoso Decreto y con el nuevo reparto de ingresos televisivos hay una partida pequeña que le corresponde al Rayo Femenino, no? ¿Por qué la Federación de «Furbo» rechaza un dinero que otorga el CSD a todas las federaciones para deporte femenino y por qué los clubes miran para otro lado?
Todas estas dudas que me surgen las mandaré por correo electrónico al programa este de la 2, «Últimas preguntas», a ver si tengo suerte y saben responderme alguna.
Rayistas, como último consejo deciros que si no habéis visto a «la banda del bate» en acción este año, si llegamos a la final no os la perdáis.
Alberto Leva
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