Míchel: Entre la calma, la paciencia y la falta de memoria

23/10/2018
Míchel: Entre la calma, la paciencia y la falta de memoria

El Rayo no termina de arrancar, a las pruebas me remito. Pero no todo es negativo, existen brotes verdes que hacen pensar que estamos cerca de conseguir el objetivo propuesto por el entrenador

Uno de ellos fue la actitud de la primera parte, siendo rápidos y estando muy activos en las transiciones y recuperaciones de balón. Otro de ellos es el de no venirse abajo pese a encajar dos goles, máxime cuando uno de ellos ha sido en propia puerta. Esa es la diferencia entre un grupo de personas que juegan al fútbol cada 7 días, y el de una FAMILIA que cuando vienen mal dadas, aprieta aún mas el culo buscando revertir la situación, los que vibran, lloran y también ríen con la gente de su barrio.

Resalto esto, ahora bien, quiero ser también muy analítico con lo que he visto en estos últimos partidos de la franja. Hay varias situaciones que me chirrían como la fe ciega de Michel en un sistema en concreto, el de mantener pese a un estado de forma algo bajo a jugadores en el once inicial o sus reticencias a cambiar el planning sobre la marcha cuando las cosas no están yendo bien en el partido.

Personalmente soy uno de aquellos que en el día de ayer pidió empezar a pensar en la posibilidad de que Michel fuera destituido. Hoy lo veo diferente. No es bueno hacer juicios de valor en caliente, nunca. Y no fue el vídeo de las lágrimas de Míchel lo que me ha hecho cambiar de parecer. Si lo ha sido, el pensar durante el día de ayer cuando Míchel se tuvo que marchar obligado del Rayo por hacer caja, contra su voluntad. También recordar cuando regresó en los infiernos de la Segunda B para empujar y remar como uno más para devolver a “su” Rayito, a “nuestro” Rayito a donde correspondía. Igualmente, cuando se hizo cargo de este equipo hace año y medio y tras dos entrenadores cuando el equipo daba síntomas de estar desahuciado y ser imposible su salvación. Y él, con la comunión entre grada, cuerpo técnico y jugadores, lo consiguió.

Creo que Míchel debe empezar a ser además de crítico consigo mismo, con algunos jugadores por más cariño y fe que les tenga. Que quizás deba empezar a tocar teclas inesperadas, en las que su conexión puede darnos un gran impulso. Que Cobeño debe peinar desde ya el mercado en busca de un mediocampista que recuerde a ese vasco pequeñito que el año pasado sostenía y creaba juego en este equipo. En eso igual Berizzo y el propio Unai pueden ayudar a cumplir mi sueño (y el de unos cuantos más seguro).

A modo de cierre, y a título personal: No quiero ni oír hablar de posibles sustitutos de Míchel, y menos aún si son los dos nombres que ayer leí. Lo que sí voy a hacer, y me gustaría pedir, es que todos pensemos si alguna otra alma caritativa hubiera hecho lo que Michel en estos años por la franja. Si alguno se hubiera dejado lo que él en el camino por salvar y hacer crecer a SU equipo, a NUESTRO equipo. Gracias a él, hoy podemos disfrutar de la Primera División en Vallecas.

“Nos sacó de la tumba, del Rayo hasta la tumba, Míchel contigo siempre”

Chirstian M. Arjona