Las guerreras franjirrojas pierden al que ha sido su patrocinador principal en la temporada 2018/19.
Una nueva baja más se suma a las ya conocidas en el seno del Rayo Vallecano Femenino. En esta ocasión no se trata de ningún miembro del cuerpo técnico ni de ninguna de nuestras jugadoras. La empresa CNI (Centro de Negocios Inmobiliarios), patrocinadora principal del Rayo Vallecano Femenino a lo largo de la temporada 2018/19, ha decidido no prolongar su relación comercial con el club franjirrojo.
Muchos fueron los que se quedaron atónitos al ver como el 9 de septiembre, en el primer partido del Rayo Femenino en la Liga Iberdrola 2018/19, el equipo lucía publicidad de CNI en el pantalón de las futbolistas. Tal fue la sorpresa, que preguntada alguna jugadora por esa publicidad, ni había reparado en ella. Por supuesto, no tenía ni la más remota idea de quién era CNI o cómo había llegado a patrocinar al Rayo Femenino.
Meses después, CNI es prácticamente desconocido para la gran mayoría de los aficionados franjirrojos, así como para sus jugadoras. Todos esperaban algún tipo de presentación en sociedad de la empresa que había decidido por apostar, por primera vez en su historia, por la sección femenina del Rayo Vallecano. Nunca antes, nadie se había decidido a patrocinar única y exclusivamente al Rayo Femenino, tal y como ha hecho esta temporada esta empresa.
Lo cierto es que ni ha habido presentación en sociedad ni se han cumplido muchos de los puntos que se pactaron a la hora de cerrar el patrocinio del equipo. Este es el principal motivo por el que CNI decide no continuar la vinculación que le unía al Rayo Vallecano una temporada más. Hasta el punto de tener que ser la propia empresa la que se encargó de hacer las pancartas publicitarias ubicadas en el campo 4.
Para aquellos que no lo sepan, CNI es una empresa vallecana, es un grupo de inmobiliarias ubicadas en el Pueblo Vallecas. Al frente de CNI hay un tipo de negocios y de larga tradición futbolera, es por ello que no sorprende su incursión en el mundo del fútbol (no ha sido la primera y probablemente no será la última). Un tipo que, cuando su tiempo se lo ha permitido, ha estado en la pasarela de la City celebrando los goles de Ángeles, las cabalgadas de Auñón, los regates de Sheila o los paradones de Alicia. Al margen de haber sido testigo directo de la marcha del equipo, nos consta que se ha preocupado de su día a día y de la actualidad del mismo.
A la vinculación comercial que unía a la marca con el Rayo Vallecano, hay que unir las gestiones que han hecho a la hora de buscar viviendas para las jugadoras foráneas del equipo. Gestiones que en ningún caso han reportado un beneficio económico a CNI y que siempre se han hecho con sumo gusto, buscando el bienestar de las futbolistas.
No es raro, por tanto, que viendo el trato de vuelta recibido por el club y el incumplimiento de algunas de las condiciones pactadas al comienzo de esta relación, CNI ponga punto y final a un acuerdo que podría haberse visto prolongado en el tiempo.
Algunas futbolistas (que al final son las principales protagonistas de todo esto) tuvieron la oportunidad, hace apenas un mes, de conocer a la persona que en su momento decidió por apostar por ellas y mostrarle su gratitud por esa apuesta que ahora finaliza.
Es una lástima que, una vez más, este club no cuide todos esos pequeños detalles con gente que merece mucho la pena y que llegan a Vallecas a aportar (más allá del aspecto económico).
