Se empiezan a confirmar las primeras salidas en el Rayo Vallecano Femenino B.
Tras el descenso de categoría del Rayo Vallecano Femenino, el futuro del equipo es un tanto incierto. Con las jugadoras de vacaciones oficialmente desde hace un mes, no hay noticias del equipo ni de sus integrantes.
Según hemos podido saber, el actual entrenador del Rayo Vallecano Femenino, Carlos Santiso, estaría planificando la próxima temporada del equipo en la categoría de plata del fútbol femenino nacional. Tanto él, como miembros de su cuerpo técnico habrían contactado con diversas futbolistas para manifestar su interés por contar con ellas. Sin embargo, consultando con el propio club, aún no se sabe nada respecto al futuro a corto plazo del equipo y la sección femenina. La noticia es que no hay noticias y, por el momento, el futuro Rayo Femenino 2022/23 no tiene ni cimientos.
Donde si empieza a haber movimiento es en el filial franjirrojo y ya son dos de sus componentes, Elvira y Esther Grijalba «Pita», las que han confirmado en sus propias redes sociales que no permanecerán en Vallecas la próxima temporada.
Ambas despedidas coinciden en el tremendo cariño que le tienen a un club que las ha marcado durante su estancia en él. Especialmente complicada ha sido la temporada para Elvira a causa de las lesiones, impidiéndole jugar todo lo que le hubiese gustado. Son solo las dos primeras, pero se prevé que sean bastantes las salidas que se produzcan en un equipo que ha realizado una gran temporada, dejando el pabellón franjirrojo bien alto siempre.
Estaremos atentos a la situación de Anita Blanco, capitana del Santa Inés, a la que nos encantaría ver defendiendo la Franja del primer equipo en Reto. El hecho de no tener claro la deriva del equipo la próxima temporada y carecer de un proyecto, no parece ayudar demasiado a que esto se puede producir. En cualquier caso, desde las oficinas de la Ciudad Deportiva no deberían dormirse en los laureles si se quiere formar un equipo que pueda competir en la nueva división.
Desde Matagigantes deseamos a Elvira y a Esther la mayor de las suertes y ojalá tengamos la fortuna de seguir cruzándonos con ellas en los terrenos de juego.