La portería ha sido una de las líneas del equipo que más críticas han recibido.
Poco a poco vamos asimilando -más bien se empezó a asimilar el día que se perdió en Anoeta- el hecho de que el Rayo jugará la próxima campaña en Segunda División. Y lo hará tras cinco temporadas en Primera, récord histórico de permanencias en la máxima categoría en la historia del club.
Una semana ha pasado del varapalo recibido. Quizás en el momento que menos se esperaba, más si cabe con la ventaja que se tenía y con un calendario favorable en las dos últimas jornadas. Ha transcurrido tiempo suficiente para poder pensar y analizar las causas del descenso. En «cortita y al pie» comenzaremos por la línea más controvertida: la portería.
TOÑO: muchos pensamos -se nos puede acusar de ventajismo- que si el alicantino no hubiera caído lesionado el Rayo hoy estaría en Primera División. A sus 36 años, y hasta el fatídico partido ante el Granada, donde cayó lesionado de gravedad, Toño estaba realizando una temporada espectacular con intervenciones salvadoras como aquella mano ante el Valencia. Posiblemente en el mejor momento de su carrera, llegó a disputar 10 partidos encajando 13 goles. Nota:8
Foto: Matagigantes
David Cobeño: inédito en los terrenos de juego. Su labor ha sido mas social que deportiva. Un capitán con mayúsculas, siempre implicado en los problemas dentro y fuera del vestuario. Mucha culpa de que Bukaneros dejara su huelga de animación es en parte a David Cobeño. Figura clave en cualquier lugar del estamento rayista, merece retirarse en los terrenos de juego y esperamos desde Matagigantes verle pronto defender la portería rayista.
Foto: Matagigantes
Juan Carlos: el canterano es, posiblemente, uno de los lunares del Rayo en la temporada finalizada. Retornó al club procedente del Córdoba. Debido a la lesión de Toño, se hizo con la titularidad en el equipo alternando con Yoel, tras la llegada de éste en el mercado invernal. Se mostró inseguro en el global de la temporada, cometiendo fallos de bulto -Barcelona, Real Sociedad, Valencia o Sevilla- que provocaron en el equipo, y en el mismo jugador, una pérdida de confianza que se tradujo en imprecisiones y errores incomprensibles. Jugó 21 partidos en liga, encajando 36 goles: 3 en Copa, con 7 goles en contra. Nota: 3
Foto: Matagigantes
Yoel: el gallego, cedido por el Valencia en el mercado invernal, llegaba como claro sustituto de Toño tras su lesión. Antes, se había hablado ya en pretemporada de un trueque Toño-Yoel entre Rayo y Valencia. Sin embargo, tras unos primeros partidos correctos llegaron los 10 goles en el Bernabéu y, a partir de ahí, las discretas actuaciones del cancerbero. Errores como los de Cornellá, o en casa ante el Éibar, provocaron su salida del once en favor de Juan Carlos. Solo volvió a jugar en la jornada final ante el Levante. Su actuación general fue pobre, pero quizás se hubiera enmendado con algo más de continuidad y confianza por parte del entrenador. Tan solo 9 partidos en Liga, con 24 goles encajados -10 de ellos en un solo partido- Nota: 4.
Foto: Matagigantes
En próximas entregas nos centraremos en otras líneas del conjunto franjirrojo.
Chema Broncano
