Un gol del ariete venezolano al filo del descanso vale para que el Rayo B gane (1-0) un disputado encuentro en la «City» frente al Unión Adarve.
Fue larga la espera, pero al fin acabó. El Rayo B volvió a ganar en casa, en este caso al Unión Adarve (1-0) en un partido bronco e intenso.
Comenzaba en la «City» un partido en el que el viento fue protagonista inesperado, ya que la fuerza de éste dificultó sobremanera el desarrollo del juego por parte de ambos conjuntos. Salió algo más enchufado el Rayo B, tirando un par de veces en los primeros 5 minutos, aunque en los 5 siguientes el Unión Adarve se recompuso y llegó varias veces al área rayista, pero sin lanzar a portería. A partir de entonces, el duelo entre Vallecas y Barrio del Pilar pasó a ser un derroche de intensidad y lucha contra los elementos, pero con poco fútbol. El filial de la Franja controlaba más el esférico y se preocupó por tratar de elaborar jugadas, mientras que el cuadro rojinegro, en constante tensión, trataba de evitar males mayores cortando jugadas por lo civil o por lo militar, y dando sustos como el disparo de Souza desde 25 metros que ayudado por el viento se estrelló en el travesaño. Curiosamente, los jugadores amonestados en la 1ª parte vestían de franjirrojo. Cuando todo hacía indicar que se llegaría al descanso con 0-0 y un juego muy pobre, en la ultimísima jugada del primer periodo un pase en profundidad perfecto dejó a Romo con el balón y solo frente a David. El delantero venezolano, con un toque sutil con la punta de la bota, superó la salida del portero y anotó el tanto que a la postre valdría 3 puntos de oro para el Rayo B. El balón entró en la portería justo al cumplirse el minuto que Maroto Criado dejó de descuento, por lo que no dejó ni sacar de centro al Adarve. Victoria parcial rayista en el último balón del primer acto del partido.
Comenzaba la 2ª parte con los visitantes lanzados a lograr el empate. Se vivió la misma dinámica que en otros partidos en la «City», pero con intercambio de papeles: el Rayo B aguantó las acometidas de su rival y trató de sentenciar a la contra; y el Unión Adarve buscó el empate de todas las formas posibles, pero sin premio. El juego se desarrolló a trompicones, ya que no pasaban 10 minutos sin que hubiese un jugador por el suelo, lo cual elevó la tensión sobre el césped a grandes niveles, llevando a la categoría de milagro el hecho de que no hubiese tanganas. La intensidad con la que se desarrolló el 2º tiempo hacía que los minutos durasen una eternidad para el equipo vallecano, y más al añadir el colegiado 5 minutos. Finalmente la defensa rayista salió bien de todas las acometidas rivales, y el partido acabó sin que se volviera a mover el electrónico.
Trabajado e importantísimo triunfo del Rayo B, el primero como local en cinco meses. 3 puntos que saben a gloria y que ayudarán a afrontar mejor la visita al líder, el Sanse, del próximo domingo.
Ficha técnica:
Rayo Vallecano B: Álex Campos (p.), Rubén Quirós, Akieme, Mario (cap.), Molina, Isi, Iván Bueno (Saballs m.82), Beltrán, Romo, Isra (Shafa m.69) y Rubén Ramiro (Del Valle m.90+2).
No utilizados: Iván Oviedo (p.s.) y Lozano.
Unión Adarve: David (p.), Joel, Lluch (Palin m.75), Cadete, Juanma (Goya m.88), Richi, Héctor, Souza, Agus, Giani (cap.) y Cuevas (Santa m.78).
No utilizados: Robert (p.s.) y Olmedo.
Árbitro: Sr. Maroto Criado. Amonestó a Ruben Quirós, Lozano (en el banquillo), Molina, Álex Campos y Rubén Ramiro en el Rayo B; y por parte del Unión Adarve a Lluch, Goya y su 2º entrenador, Miguel Ángel Sánchez.
Gol: 1-0, m.45+1, Romo.
Ciudad Deportiva Fundación Rayo Vallecano, unos 150 espectadores. Partido correspondiente a la 24ª jornada del Campeonato Nacional de Liga, Tercera División, grupo VII. Tarde fría y nubosa, con fuertes vientos que dificultaron el juego. Césped artificial en buenas condiciones para la práctica del fútbol.
Informó Jorge Morales García.