Diario Copero: Día 2

Sábado 16 de Mayo de 2015

Amaneció un día soleado por tierras tinerfeñas, temperatura muy agradable, alrededor de 20 grados. A las 8:30 estábamos citados en el comedor para desayunar. Nuestro querido Héctor dio unas pautas importantes acerca de la alimentación que tenían que llevar los jugadores debido a la cercanía del partido. Tras finalizar el desayuno, los chicos disponían de una hora para prepararse mientras José María y Héctor se acercaron a un supermercado cercano para comprar bebidas isotónicas y fruta para el partido. Sobre las 9:45 iban llegando los jugadores a la sala Guajara donde el míster, Diego Merino, dio la charla habitual prepartido.

Tras terminar la charla, bajamos a la calle donde nos recoge el autobús para llevarnos a la Ciudad Deportiva del CD Tenerife. Sobre las 10:20 llegamos y después de dejar las cosas en el vestuario, salimos al campo número 2 de hierba natural. El estado del césped está en perfectas condiciones para disfrutar de un buen partido de fútbol. Poco a poco van apareciendo por la camilla jugadores habituales, especialmente para calentar y estirar de cara al partido. Las caras de concentración y las ganas de salir a calentar se notan en el ambiente.

Y por fin llegaron las 12 de la mañana, hora canaria. Con un poco de retraso por el lanzamiento de una bomba de humo por aficionados locales, comienza el partido. Tras los primeros minutos y las entradas fuertes, que no son cortadas por el colegiado tinerfeño, intentamos llevar al partido adonde lo había planteado el cuerpo técnico. Las imprecisiones fueron constantes durante la primera parte, con alternancia de ocasiones para ambos conjuntos.

Durante el descanso, Diego trasmite a los jugadores que, sin errores nuestros, apenas van a tener ocasiones. Después de algún acercamiento peligroso a la portería local, en el minuto 56, Fran inicia una jugada en banda. Tras realizar una pared de manera rápida, da un pase a la espalda de la defensa a Shafa, que al levantar la cabeza y ver que Uche entraba por el centro, le da el pase de la muerte para marcar el 0-1. Los jugadores, después de celebrarlo, se acercan al banquillo para comentarnos que el árbitro les había dicho a los jugadores locales: “tranquilos, que a la siguiente falta que haga un jugador que tenga tarjeta le saco la segunda amarilla”.

Las faltas eran constantes pero sin ser señaladas, ya que como bien dijo a nuestro capitán: “le gustaba mucho el fútbol inglés y dejaba jugar”, pero el rasero era diferente para ambos equipos. Nosotros hacíamos faltas que nos costaban tarjetas y a ellos ni tarjetas ni faltas en contra. Después de marcar el 0-1, disponemos de unos minutos con un par de ocasiones para matar el partido, pero el balón no quiso entrar. En el minuto 89, Aki ve injustamente la segunda tarjeta amarilla por robar el balón en el mediocampo. Y ya cuando llega el minuto 90 comienza el show. El colegiado nos comenta que va a añadir 5 minutos por los cambios que se habían realizado y por las interrupciones que se habían producido al tener que atender a algún jugador.

Tras llegar a los 5 minutos decretados de descuento, nos dice que va a añadir dos minutos más porque -según su criterio- se sigue perdiendo tiempo. Y, como parecía que no estaba contento con el resultado, en el minuto 98 el Tenerife nos marca el gol del empate. Los chicos, hundidos por el trabajo realizado durante todo el partido y luchando contra las adversidades, pelearon hasta el final, en vez de hasta el minuto 95, hasta el 102. Aunque pueda parecer que estábamos jugando una prórroga por el minuto que era, el colegiado quiso añadir casi 13 minutos.

Me parece lamentable que una competición tan bonita como la Copa del Rey, donde están compitiendo los 16 mejores equipos juveniles de España, te tengas que pagar todos los gastos del viaje y del desplazamiento sin ningún tipo de ayuda por parte de la Real Federación de Fútbol (RFEF), así como los arbitrajes. Considero que una competición de este nivel debe ser arbitrada por árbitros de otras comunidades autónomas diferentes a los equipos que juegan.

Fueron momentos complicados al finalizar el partido, pero los chavales ya tienen ganas de revancha para el partido de vuelta del próximo sábado en casa.

Sobre las 15:00, debido a que el árbitro tardó más de la cuenta en redactar el acta del partido, abandonamos las instalaciones del CD Tenerife de camino al hotel para reponer fuerzas, recoger las maletas y dirigirnos al aeropuerto de Tenerife Norte.

A las 17:00 salimos del hotel camino del aeropuerto. Aquí se produce una de las anécdotas del viaje. Viso, tras recibir una llamada, le dice a los compañeros que estaban a su lado que le lleven la maleta. Al llegar a la puerta 11, pregunta que quien tiene su maleta, pero ninguno la había cogido. Pasamos todos el control porque éramos los últimos en embarcar y faltaban 4 minutos para cerrar las puertas. Al final la encontró donde la había dejado y, tras darse una carrerita, pudo llegar a tiempo de no quedarse en tierras canarias. Con un adelanto de 25 minutos sobre el horario previsto llegamos al Aeropuerto Adolfo Suarez – Madrid Barajas, de ahí camino a la Ciudad Deportiva para finalizar un fin de semana muy bonito que no pudo completarse con una victoria.

Desde aquí, me gustaría pedir a toda la gente que acuda a la Ciudad Deportiva el próximo sábado a las 12:00 para apoyarnos a pasar la eliminatoria. ¡¡Os necesitamos a todos!!

¡¡HASTA EL PRÓXIMO FIN DE SEMANA, RAYISTAS!!

 #LaCopaMola  #ElDiarioCoperoDeFueyo

*Carlos Álvarez Fueyo es fisioterapeuta del Rayo Vallecano.