Video Homenaje al Rayo Vallecano Juvenil A

El domingo 19 de abril el Rayo Vallecano tenía la posibilidad de agrandar su, para algunos, mínimo palmarés en cuanto a títulos se refiere. A esos no les vamos a dedicar ni un minuto para explicarles qué otra clase de títulos hacen grande a un club como el nuestro. En este caso era nuestro Juvenil «A», el que, tras pelear con equipos de a priori más entidad, como Real Madrid o Atlético de Madrid, no solo les había tuteado sino que llegaba a la última jornada como líder, y dependiendo únicamente de lo que hiciera en su último partido ante el Alcorcón en territorio alfarero.

Dada la gran cita, MATAGIGANTES no quiso perderse dicho evento y, pese a jugar el primer equipo del Rayo Vallecano, quisimos contar minuto a minuto lo que aquellos chavales de entre 16 y 18 años estaban a punto de vivir. Para ello, desde las 9:45, hora a la que los jugadores estaban citados por Diego Merino en la Ciudad Deportiva, estuvimos atentos a todo lo que les rodeaba. Caras de concentración en unos; bromas, saludos y abrazos en otros; pero, como denominador común en todos, el gesto en el rostro de la responsabilidad de lo que había en juego, gestos de concentración en los chicos y nervios a flor de piel entre los familiares que allí les dejaban y se despedían hasta volver a verles un par de horas después ya vestidos de corto.

Partimos junto al autocar en un viaje que duró apenas 20 minutos, y ya se palpaba en el ambiente que comenzaba algo importante para los allí presentes. Fueron llegando cada vez más y más aficionados rayistas, tantos que las gradas se teñían de franjirrojo, culminándolo con la llegada de unos treinta o cuarenta miembros de Bukaneros, los cuales no pararon ni un segundo de alentar a los chavales.

El partido tuvo dos partes distintas. Una primera en la que las fuerzas estaban muy igualadas y el Rayo era incapaz de marcar gol a un Alcorcón muy serio; y una segunda parte en la que los chicos de Diego Merino se hicieron con el control del balón, pero llegaban al área contraria con más corazón que cabeza. Y cuando más negro se tornaba todo, con los 90 minutos ya de sobra cumplidos, llega la jugada más elaborada y trenzada del Rayo durante todo el partido -la que más nos recordó al Rayo de la Liga-, y tras una gran dejada de Ale Pajuelo, Uche no perdonó y puso el balón cerca de la escuadra y lejos del alcance del portero rival.

Estallido de alegría, emociones desbordadas, invasión de campo… Y a todo esto, el partido no había finalizado, algo que sucedió segundos después, y con el pitido del árbitro de nuevo la alegría y la euforia manaban de las gradas del Anexo de Santo Domingo. Llantos, abrazos, cánticos y un sinfín de emociones que nuestro compañero Miki Tejada inmortalizó con su cámara y que a continuación podréis ver. Con colofón final en la Fuente de la Asamblea, como no podía ser de otra forma.

¡¡Enhorabuena Campeones!!

Alberto Leva.